4

1.5K 127 24
                                    

Simón.

-Así que... ¿le dijiste que le meterías la lengua de una? -la voz de su amiga resonó por el otro lado de la línea.

-Si, yo... agh, no lo sé -murmuró frotando su mano contra su cara en un intento de bajar el calor instalado en sus mejillas-. Yo... solo... -paró de hablar suspirando cansado, ni siquiera sabía cómo había reunido valor para decirle eso, cansado se sentó en la tapa del baño.

Porque si, nuevamente se encontraba en el baño, hablándole a Luna sobre todo lo que acababa de pasar en esos minutos, aunque a ella parecía no molestarle en lo absoluto.

-Tú solo querías meterle la lengua... -concluyó la chica al no recibir respuesta.

Simón levantó la cabeza sorprendido por las palabras de su mejor amiga con el rostro hecho casi un puto tomate-. ¡Eso fue ofensivo! -murmuró.

Luna sólo soltó una risa por la linea telefónica. -¿Pero tengo razón? -preguntó.

Simón solo soltó una risita antes de contestar. -Pero tienes razón -respondió escuchando la sonora risa de la chica por el celular.

De la nada, toda esa incomodidad y nervios que tenía se fueron... para ser reemplazados por un largo suspiro frustrado.

Desganado apoyó su cabeza contra la pared. -Pero debiste de ver cómo la besaba, Luna -habló.

La chica guardó silencio, dejándolo hablar.

-Ella solo se dejó besar, se veía tan feliz junto a ese jopudo.

-¿Jopudo?

-Ese chico tenía un peinado extraño, deberías verlo -Simón soltó otra risa-. Pero eso no importa, con jopo o no es obvio que ella lo ama, y yo sólo quería patearlo y ser yo quien la bese, yo quien la ame, y yo el que ella abrace -soltó un largo suspiro, tomando un poco de papel higiénico y secándose unas lágrimas falsas dramáticamente-. Ay, ¿por qué la vida es tan cruel? Cuando llegué aquí, pensé que podría encontrarla, conquistarla y...

-...Cogerla -interrumpió.

-¡Luna! ¡no me interrumpas! -Simón apoyó su antebrazo suavemente en su cara, estaba ardiendo-. ...Además iba a decir que tener una vida felíz.

Luna sólo rió. -Entonces si quieres eso, ¿Qué haces sentado en ese baño sintiendo pena por ti mismo, y hablando conmigo? -Habló animadamente desde la otra línea-. Ve, búscala, háblale y conquistala.

-¿Y cómo hago eso?

-Mmm, no lo sé, háblale con palabras lindas, o se sincero... dile que quieres recuperar lo que una vez tuvieron. No sé, pero no te mandes una cagada.

Simón pensó en las palabras de la chica, Luna siempre ha sido una persona que lo conoce de pies a cabeza, y que siempre puede contar con ella, una gran amiga que jamás lo traicionaria o haría algo para poderlo lastimar.

"Entonces ¿Por qué no hacerle caso?"

(...)

Ámbar se encontraba en una mesa ¿Comiendo?...

¿Qué carajos estaban haciendo? Están comiendo y hablando, pero nadie toca las bandejas con comida, ¿Qué demonios?

Simón sacudió la cabeza auto retandose.

"¡Concéntrate en el objetivo, Simón! ¡En el objetivo!"

En el rubio objetivo que movía sus rosados labios tan sensualmente, esos esponjosos labios que se meneaban de arriba a abajo lentamente , y Simón solo podría preguntarse como se verían alrededor de su...

-¡Ah, joder. Soy un pervertido! -gritó, entre todo el ruido que había en ese espacio, auto asustándose por sus propios pensamientos.

-Por como la mirás, sí... eso parece -una voz se plantó a su lado, el morocho volteó hacía ella viendo a un chico bajito con una bandeja de comida en manos.

Simón solo examinó al chico detenidamente antes de hablar. -¿Tanto se nota?

El bajito sonrió.

-Pareciera que te la estás violando con la mirada -risueño se sentó en la mesa a un lado suyo-. Soy Pedro, un gusto.

Estrechó la mano del chico cuidadosamente antes de sonreirle y dirigir la mirada de nuevo a esos labios rosados perfectos.

"AH, ¿POR QUÉ ES TAN PERFECTA?"

-Deberías ir a hablarle.

-¿Tú crees? -preguntó.

Pedro solo concentró su mirada en la chica en la lejanía que reía con su ¿Novio?, no lo sabía, según él habían terminado pero.. ah, no importa. -Te ves como una persona sedienta de algo, eso no es lindo -dicho esto, el chico solo empezó a comer de su bandeja.

Eso fue raro, pero a Simón no le importaba, o al menos no ahora, ¿Debería ir?

"Ve, búscala, háblale y conquístala."

Las palabras de Luna, se estrellaron en su cabeza.

"Te ves como una persona sedienta de algo, eso no es lindo."

¿Sedienta?... ¿una persona sedienta de algo?... nuevamente volvió a mirar a la chica hablando con sus dos amigas y dos chicos, uno lo conocía 'El Jopudo' que la besó anteriormente, y otro que no conoce. Pero Ámbar estaba con ellos, viéndose majestuosa.

Tal vez si sea una persona sedienta...

"Una persona sedienta de Ambar Smith."

Y sin esperar más, Simón se levantó de su asiento, bajo la atenta mirada de Pedro, caminando firmemente hacía ese grupo.

------------------------------------------------------------------------------------------

Hola holaa volví sisi, esperamos que les haya gustado este nuevo capítulo y no se olviden de seguir a MxstxrSwxg que es la otra autora de esta bella novela ♡.

Simón, el pervertido. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora