Simón, el pervertido.

9

Ámbar.

—¿Estás ensayando para el Open? —pregunta la rubia muy atenta al italiano.

—Claro que si, cantaremos, Prófugos. ¿Verdad?

—Si señor —ella ríe y entonces mira al amigo de Matteo, Gastón, el segundo chico más popular del Blake.

—¿Y vos, Gastón? ¿Vas a cantar o algo? —pregunta está mirándolo, apoya la barbilla en su mano y lo mira con una sonrisa.

—Si, voy a cantar con Delfi, una canción sorpresa —le guiña un ojo y ella ríe, estaba feliz de que su amiga tuviera un novio tan bueno.

Ámbar se pierde en medio de la conversación, se encuentra con los ojos marrones caminando hacia ella, los del mexicano que tanto le gustaban.

—Ya vuelvo, voy al baño, ¿si? —besa los labios del italiano.

Camina hacia el baño, pero cuando no la ven sale hacía el patio, así que Simón, no lo duda y la sigue. Al verla sola sentada en un banco se acerca y se sienta a su lado tapándole los ojos.

—Hola bonita, hoy te ves tan... —no termina la frase que Ámbar se levanta y lo mira cruzada de brazos y respirando con fuerza.

—Ni se te ocurra decir lo que vas a decir... —lo amenaza señalándolo con el índice, muy cerca de este.

—Tan sexy... —termina de decirlo y Ámbar frunce el ceño mirando su sonrisa maligna y perversa.

—¡Calláte! —le da un codazo en el brazo y este se hace el dolido.

—Estás hermosa, mírate... —la toma de la cintura atrayéndola a él y susurra en su oído—. Me prendes Ámbar Smith...

Ella queda atónita a sus palabras, cada vez estaba más segura de que ese no era Simón, no Simón Álvarez, no el niño que ella conoció en México, definitivamente no.

—S-Simón... —sus pensamientos se bloquean y sólo puede pensar en cómo se verían ellos dos en...

"¿QUÉ ESTAS PENSANDO, ÁMBAR?"

—Shh... —le acaricia el labio inferior con el pulgar y corre el cabello de su rostro, rozando su mejilla con sus dedos. Su piel era tan suave que daban ganas de acariciarla para siempre.

—Simón.. Dejame... —pero en realidad no quería soltarse, se sentía demasiado bien, y le gustaba tanto que creía que se iba a caer de la emoción.

—Ámbar... —va a mirarla a los ojos, pero entonces ve a una niña parada en el medio del parque del colegio, muy parecida a Luna, su mejor amiga. ¡Esperense, es ella!. Suelta a Ámbar haciendo que casi caiga al suelo y corre a abrazar a su amiga, la abraza muy fuerte y la hace girar mientras ella sólo ríe y lo abraza. Ámbar, a lo lejos, los mira frunciendo el ceño y decide entrar; al final, Simón era de esos que están con todas.

(...)

—Ámbar, ¿estas bien? —le pregunta la pelirroja a ella, estaba callada y casi no había comido.

Ella se levanta sin decir nada, y con su caminata de "chica mala" se dirige hacía el estacionamiento, donde la esperaba su chofer, pero algo la hizo detener.

—Te quiero, Simón —escucha que le dice la niñata recién llegada, también tenía acento mexicano.

—Te quiero más Luna —rueda los ojos, pero entonces ve lo que no quería ver. Simón y Luna se unen en un beso que parecía agradarles muchísimo. Siente sus ojos llorosos, camina rápidamente hacia la limusina y al entrar, cierra la puerta con mucha fuerza, sintiéndose, por primera vez, usada por el chico que verdaderamente había robado su corazón.

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Y aquí les dejamos otro capítulo mas ♡. Sigan a MxstxrSwxg ♡.