Heterosexual [Aoiha]

Cap. 27 | Decisiones.

¿Ser tu amigo? Aoi, ¿Escuchas lo que preguntas?.

~•~

*Pov's Kai*

Estoy en camino a un despacho jurídico donde Aoi y su esposa pasarían a ser "Exs".
Conociendo la personalidad de Aoi, podría jurar que irían a la corte para pelear la custodia de la pequeña niña, pero no, al parecer ambos quedaron en el acuerdo de que ella se hiciera cargo de su hija.
Tan sólo faltaba firmar el papel del divorcio y yo sería testigo.

Otro testigo sería Uruha, si, Uruha.
El día de ¿Anteayer? Si no mal recuerdo, anteayer Aoi fue a pedirle disculpas a su casa.
Reita me contó que Yuu había llorado enfrente de Shima, lo que hizo que fuese más fácil ser perdonado.

Aunque, si piden mi opinión, diría que Uruha fue muy fácil, ni siquiera esperó a que le rogara un poco...

Además de que la noticia de que Tomomi vió a Uruha semi desnudo me dejó con Miles de preocupaciones hacia la menor.
¿Habrá visto demás?, ¿Habrá entendido lo que él hacía en su casa? Dios, si me hubiera pasado a mí, eso sería lo primero que le interrogaría a la pequeña para saber si sería necesario llevarla con algún psicólogo.

Estaciono mi coche en el lugar correspondido y salgo de él.
Ya afuera logro ver a varias personas rondando cerca, algunas me miraban inexplicablemente y eso me ponía algo nervioso sin saber el porqué.

—¡¡Kai!! — El alto novio de Aoi me llamó desde lejos, sabía que era él porque me había parecido verlo segundos atrás.

Lo miré sonriente y me acerqué tranquilamente hasta él para saludarlo con un amable abrazo.

— Entremos juntos, me siento nervioso — Dije mientras le tomaba de la mano y lo jalaba.

— Espera, he traído a alguien más — De la nada sale Ruki. Él venía vestido más casual que yo y Uruha.

Ruki me sonríe y yo imito su acción.
Sin decir alguna palabra, Ruki toma la mano libre de Uruha y espera a que decidiéramos entrar.

¿Por qué le tomó de la mano? Quién sabe, pero parecían pareja en ese instante.

— Entonces...— Dije en voz baja y solté la mano de Uruha para adelantarme en entrar a aquel lugar donde ya nos estarían esperando Aoi e Izumi.

Sin esperar y sin saber si ambos me seguían, ya me encontraba adentro.
El lugar tenía un olor muy raro, no era desagradable pero tampoco era lindo olerlo.

Caminando por los pasillos, Aoi me mira y hace una seña para que nos apresuremos el paso.

No le hice caso y seguí caminando con la misma velocidad que antes.

Cuando entré, logré ver lo único que tenía que ver: A Izumi y a Aoi. Cada quien estaba a un costado de la mesa, al parecer esperando a que el hombre encargado les pase el papel para firmarlo de una vez.
Izumi firmó primero y se lo pasó a Aoi con una pequeña sonrisa incómoda, a lo que él sólo la imitó y siguió con la acción de firmar el papel. Después me miró, sabía que era mi turno para que el papel fuese válido ante la ley.

– ¿Uruha? – Llamé en voz baja al castaño, quién apareció mágicamente al lado mío con Ruki posicionado atrás de él.

Y por fin firmó.

Su semblante era uno completamente  serio, pero yo bien sé que estaba feliz por dentro, feliz porque al fin él y Aoi andarían juntos libremente sin tener que cuidarse de la esposa del pelinegro. Sabía que eso pasaba por su mente porque en cierto momento esbozó una leve sonrisa al mirar que el encargado guardaba el papel en una carpeta y se la entregaba a Izumi.