Sorry... I'm gay 【 YM 】

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- Bien chicos. Gracias por aceptar la salida.

- No hay de qué, es un gusto. -Se despidió JungKook agitando su mano. Antes de cerrar la puerta de atrás, le dirigió una mirada picarona a TaeHyung - Hoy estoy solo en casa.

TaeHyung entendió las intenciones del menor. Guiñó uno de sus ojos a los que estaban sentados delante y se despidió para bajar del auto e ir con JungKook hasta la casa del mismo.

JiMin miró como la puerta de la casa se cerró y evitó pensar en lo que seguramente ellos harían. No quería pensar en eso, más que todo porque un cosquilleo extraño en su pelvis le hacía imaginar muchas cosas. Muchas cosas que repentinamente quería experimentar.

- JiMin -Lo llamó YoonGi. El nombrado viró su cara y detalló cada parte del rostro de su acompañante. Ambos se sonrieron - ¿A tu casa?

JiMin notó aquel tono algo pringado de decepción. Pudo oler el aroma electrizante que desbordaba YoonGi, y quería poder tener la libertad de tocarlo por completo. Saber que era lo que ahora le pertenecía, y que YoonGi hiciera lo mismo con él.  Negó sintiéndose ridículo por sus pensamientos.

- ¿No? ¿A donde quieres ir entonces? -Cuestionó el mayor en un tono divertido. JiMin abrió grande los ojos sin saber que contestar.

No se refería a eso...

- Quiero decir, emm... Si. A mi casa... -YoonGi soltó una pequeña risa antes de volver a tomar el volante, era importante que tuviera cuidado ya que las vías estaban humedas por la reciente lluvia que apenas había acabado. El silencio era sepulcral y así le gustaba a JiMin. Era agradable escuchar la respiración calmada de YoonGi, percibir su presencia.

- Amorcito ¿Qué te traes entre manos? Luces muy callado -Preguntó el mayor sin dejar de ver la carretera.

- ¿Qué hora es? -Ignoró JiMin queriendo evitar un momento incómodo.

- Pasadas las once ¿Por qué?

El castaño suspiró.

- No quiero ir a mi casa hoy.

YoonGi lo miró por un instante frunciendo las cejas.

- ¿Y eso se debe a...? -Indagó con ganas de saber qué tenía a su caramelito tan silencioso.

JiMin dudó varios segundos en contestar.

- Quiero dormir contigo.

Enhorabuena.

- No tengo problemas, creo que... Uhm, déjame pensar. -Con una mano manejó el volante tomando una rotonda para ir en otro camino, la otra mano la usó para apretar el puente de su nariz. La arrugó luego de unos instantes y sonrío pequeño - Vale.

JiMin calló. Sus manos estaban heladas y bastantes sudadas para cuando llegaron a la casa de YoonGi. Entraron a la casa y JiMin esperó pacientemente en el sofá mientras su chico metía el carro a la cochera. Sólo por pura curiosidad se levantó del lugar en el que estaba sentado y comenzó a mirar cada una de las fotos colgadas en la pared del pasillo que daba a las escaleras.

Casi muere de ternura al ver a un YoonGi de aproximadamente trece años. Cubrió sus labios con sus manos y los mordió conteniendo risas al notar una más reciente; YoonGi con un traje bastante formal. Se veía sexy... Tan caliente.

El castaño quiso tocar el rostro de YoonGi a través del cristal pero una respiración en su cuello lo hizo dar vuelta de inmediato. YoonGi le sonrió mostrando los dientes.

- ¿Así que te diviertes viendo mis fotos? -Negó varias veces aprisionando las manos de JiMin sin mucha fuerza - Eres un chico malo -Susurró. - A los chicos malos se les castiga.