Rivales | Chloenette

Capítulo Extra

Pov's Chloé

Ojos celestes. Sus sueños siempre estaban repletos de ellos, la risa de Marinette y ella tomando su mano.

-Chlowi...-escuchaba una voz, pero la rubia la ignoraba, el sueño estaba muy agradable.

Marinette le daba un beso, Chloé sentía como si estuviera flotando y un hormigueo hasta en los pies. Sus labios eran cálidos y sus lenguas se encontraban, enviándole choques eléctricos.

-Chlowi.

¿Qué haría ahora? Después la ojiceleste se apartaba, la rubia la veía como tonta antes de que Marinette le mirara inexpresiva. Se estaba burlando de ella, todo por lo que seguro le había hecho en la cafetería. Marinette se alejó de ella, la rubia la veía retroceder, las dos sin dejar de verse, Chloé mirándola como si todo lo que entendiera sobre el amor que nunca ha sentido por Adrién fuera la ojiceleste. Pero siempre se arruinaba, sentía un vacío al verla irse por el pasillo dejándola sola, mezclándose entre el mar de personas. Quedando Chloé completamente sola.

-¡CHLOWI!-la rubia abrió los ojos asustada, intentando ubicarse.

Estaba en su cama, envuelta en miles de mantas y por esa razón sudaba tanto. Qué horror ¿Quién había gritado?

-Ya despertaste-volteó el rostro y allí estaba su dulce hermanita, arrodillada junto a la cama, viéndola.

-No me grites en la oreja, enana-sonrió mientras abría sus brazos para que la pequeña rubia se lanzará sobre ella.

-Le diré a mamá-hizo un puchero, pero a pesar de todo se deslizó a los brazos de su hermana.

Estuvieron unos segundos mirando al techo tranquilamente, Chloé intentaba calmar los latidos acelerados de su corazón. Siempre despertaba sonriendo como tonta al soñar con Marinette, pero desde hace unos días que sentía un gran temor, el temor de no ser correspondida por la ojiceleste.

-¿Estás bien, Chlowi?-la niña jugaba con los cabellos en la frente de Chloé, la mayor sonrió.

-Claro, Tay ¿Por qué? -apretó su naricita con el dedo, Taylor le sacó la lengua.

-Parecías muy triste, al despertar-dijo muy bajito, como si fuera algo incorrecto.

Chloé sonrió, su hermanita podía ser muy suspicaz.

-Pero ahora estoy feliz, enana-la pequeña comenzó a reír y fue suficiente para subirle el ánimo a Chloé -. Ahora, vamos a comer que más tarde tenemos que buscar a la exiliada.

Taylor abrió sus ojos brillantes, mientras saltaba en la cama, emocionada.

-¡Vamos a buscar a Amby!-de un salto aterrizó sobre sus piecitos mientras llevaba Chloé de la mano -. ¡Chlowi, apúrate! Si comemos más rápido podemos ir a buscar a Amby antes.

La niña tenía un punto, Chloé negó con la cabeza riendo mientras se inclinaba para darle un beso en la frente a su hermanita.

-Primero tengo que hacer algunas cosas, enana. Ve bajando tu-le dio un empujón cariñoso por la espalda, la niña asintió riendo mientras bajaba.

Chloé intentó hacerlo todo rápido, también estaba ansiosa. Ya llevaba casi tres semanas de vacaciones y al fin su hermana mayor vendría a la casa. Se enjuagó el rostro, cambió su pijama por una falda y una blusa de seda antes de maquillarse ligeramente y colocar un lazo en su cabello.

Chloé siempre se preguntaba, pero nunca se había atrevido a hacerlo en voz alta, si a Marinette le gustaban sus lazos. Ella antes pensaba que eran muy infantiles pero Nathaly le decía que tenía que sentirse cómoda con ella misma y Chloé se sentía cómoda con lazos, siempre fue así. Así de simple.