Rivales | Chloenette

Capítulo 43

Era miércoles y Marinette se había encargado de evitar a la rubia, cada vez que Chloé intentaba acercarse ella huía. Algunos en el colegio la miraban, pero ella no les hacía caso, también estaba el problema de que tenía que evitar encontrarse con Adrién y sus amigos. Por suerte Lila estaba feliz de la vida con Nathaly, oficialmente ya estaban saliendo o así quedó cuando el lunes fueron por el pasillo tomadas de la mano, mucha gente quedó sorprendida, pero las amigas de Lila estaban felices.

- ¿Cuánto tiempo vas a seguir huyendo de Chloé? - le reclamó Aurore mientras estaban en el aparcamiento.

Marinette se recostó del capo y sonrió, no quería hablar de este tema y la mejor forma de evitarlo era bromeando.

- Ella no está lista para mi belleza, así de simple - ladeó la cabeza, estaba muy feliz.

- Rompió con su novio - le recordó la rubia mientras se cruzaba de brazos.

Marinette ya estaba informada al respecto, eso fue lo primero que le dijeron cuando llegó el lunes, estaba muy feliz. Aunque fingió sentirse indiferente.

- Felicidades, así Adrién va a querer matarme con más razón - se burló aunque arrugó el ceño, al ver que era todo lo contrario.

- Pues yo no creo - dijo Aurore observando lo mismo que la ojiceleste.

En una de las mesas estaba Adrién riendo mientras intentaba acercarse a Sabrina, la chica se apartó de él e intentaba huirle, pero Adrién la sostuvo de la muñeca mientras Kim reía.

Marinette sin saber muy bien comenzó a ir hasta ellos, escuchaba a Aurore llamarla, pero sus ojos asesinos estaban en Adrién mientras sonreía.

- ¿Ahora te quieres tirar a la amiga de tu ex? Qué poco varonil - le dijo soltando una carcajada, Adrién al verla apretó los puños, pero sonrió.

- Estoy en el mercado, yo me tiro a quien quiera, bollera - dijo sujetando a Sabrina, la ojiceleste llegó hasta él y le dio una patada en la rodilla -. ¡Mierda!

Sabrina se soltó mientras el chico se encogía de dolor y fue hasta los brazos de Max, que estaba llegando, el chico la abrazó con fuerza y miró con mala cara a Adrién.

- Por esa razón te dejaron botado, no vuelvas a tocar a mi novia - Max dijo amenazante y a pesar del miedo de Sabrina, la chica le sonrió feliz.

- Todos son unos idiotas, yo dejé a esa zorra - dijo Adrién levantándose mientras planeaba arrojarse contra Marinette.

- Yo que tú pensaría bien antes de hacerlo, si te detienen por una pelea otra vez, te sacan del equipo - mostró una sonrisa triunfadora y Adrién hizo una mueca, Marinette sabía que estaba en lo correcto.

- No importa, puedes quedarte con esa perra. Te dejo los restos, es una sucia que se tiraría a cualquiera - sonrío con arrogancia y Marinette sintió la sangre arderle, apretó los dientes.

- A mí no me van a hacer nada por otra pelea más - dijo levantando los puños, le daba igual si la expulsaban, le iba a dar un golpe a ese idiota. (Nadie te detiene)

- ¡Marinette! - le llamó una voz conocida.

Chloé la sostuvo por el brazo, evitando que fuera hasta él, llevaba el uniforme de animadora y su cabello estaba sudado mientras observaba con reproche a la rubia. Marinette la observó con incredulidad, ya que no le hablaba desde hace muchos días.

- Hazle caso a la zorra, Dupain - le dijo Adrién riendo, aunque nadie parecía seguirle la broma.

El rostro de Marinette estaba rojo y apretaba los dientes, intentó acercarse, pero Chloé la sujetó con más fuerza e intentó jalarla.

- Marinette, déjalo. No vale la pena - le dijo fulminándola con sus ojos oscuros, Marinette frunció el ceño.

Enojada, se soltó de Chloé, mientras caminaba dando pistones, hasta el auto de Max. La rubia la siguió, junto con Max y Sabrina.

Cuando llegó, la rubia le iba a decir algo, pero, al ver su enojo, se calló. Marinette se subió al auto, dando un portazo y se cruzó de brazos en el asiento.

- Vamos, yo las llevo - ofreció Max dándole un tierno beso en los labios a Sabrina, quien sonrió.

Aurore y Chloé aceptaron, la ojiceleste sospechó que fue un plan de su amiga, ya que junto a ella se sentó Chloé mientras que Aurore quedaba en el otro extremo y la animadora iba adelante con Max. Marinette ignoró por completo a Chloé mientras apoyaba la cabeza en el cristal, Max y Sabrina hablaban, pero aun así todos podían sentir la tensión entre las dos chicas.

- Marinette ¿Me vas a hablar? - le susurró la rubia, recibiendo el silencio de la otra chica, suspiró, aunque ahora más irritada -. Mira, fenómeno, te estoy hablando.

- Cállate, Bourgeois - le dijo por debajo aun mirando por la ventana, no quería escucharla, no si iba a hablarle para rechazarla o burlarse.

- Marinette - dijo la rubia ya rendida e intentó tomar a Marinette de la mano, la chica la apartó y Chloé volvió hablar con la voz rota -. Marinette, yo....

- Llegamos - dijo la ojiceleste cuando Max se estacionó frente a su casa, se colocó la mochila -. Hasta luego, chicos - se despidió y todos hicieron lo propio, menos Chloé, que se desabrochó el cinturón y se bajó con ella.

- Pueden irse sin mí- les sonrió y le hizo señas a Sabrina de que llamaría más tarde, asintió y se fueron.

Marinette la miró con una mueca, se encogió de hombros y fue hasta su casa, pero alguien la detuvo del brazo.

- Marinette, no puedes ignorarme toda la vida - le dijo intentando captar su atención, la ojiceleste no volteó a verla y Chloé se colocó frente a ella -. Mírame.

- ¿Por qué mierda te quedaste? Tengo hambre, Bourgeois, déjame entrar - intentó hacerla a un lado, pero Chloé se aferró a sus brazos, acercándose a ella -. Aléjate.

- ¿Eso quieres? - preguntó burlándose, pero en sus ojos azules había dolor, Marinette contuvo el aliento cuando el rostro de Chloé se acercó al suyo.

- Marinette... yo... yo... -la ojiceleste no quería escucharlo, no lo soportaría.

Al parecer no se iba a burlar de ella, pero puede que la rechazara con amabilidad. Mucho peor.

- Yo... lo del otro día, era mentira - dijo sintiendo un dolor en su pecho, Chloé se alejó y la miró a los ojos.

- ¿El otro día? - preguntó confundida.

- Si... lo que le dije a Adrién... sólo le hice para dejarlo en ridículo - soltó y al ver los ojos de Chloé sintió cómo se le rompía el corazón, la rubia parecía querer llorar y Marinette no sabía el por qué -. Oye...

(¡Maldita lenta!)

- Fue... tu no... ¿Fue mentira? - preguntó, alejándose un poco, mientras limpiaba una lágrima que se escapó de sus ojos.

Marinette, al ver eso quedó arrepentida, quería decirle que era mentira y que ella estaba locamente enamorada. Pero sentía miedo de que la rechazara, aunque ¿Por qué Chloé lloraba? (Idiota)

- Oye... - intentó acercarse nuevamente, pero Chloé se apartó de ella cómo si quemase, río con sorna mientras intentaba aparentar que estaba bien.

- Me parece perfecto, ya estaba fastidiada de tener a una idiota enamorada tras mío todos los días. Qué desagradable - dijo con una voz arrogante, antes de darse la vuelta y comenzar a caminar, lejos de la casa.

A Marinette le dolió aquello, apretó los puños y no importa cuánto quisiera ir tras ella, no lo hizo. Entró a su casa, al subir a su cuarto lanzó su mochila y gritó durante varios minutos en la almohada, ella sabía de lo que era capaz Chloé. Sólo que, por una vez, deseó no conocerla tanto como para saberlo.

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