Capitulo 24: Errores

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Hoy un sabado, de fiesta. Conti, Mili, Vale y yo estamos llendo a una fiesta de uno de mis amigos, para ser más exactas estamos por ir ahí para despejarnos un poco del colegio, ya saben un descanso. Juan ya esta en la fiesta pero yo estoy llendo, solo espero que no este borracho. Llegamos y el olor a cigarrillo era impresionante. Al bajar del auto un chico me ofreció uno, le grite "¡Deja el pucho!". Yo nunca fume y no creo hacerlo, siempre quise probar un cigarrillo pero no estoy segura de hacerlo. Al cruzar la puerta Conti ya estaba besuqueandose con su novio, tipico. Yo solo buscaba a mi novio, tengo miedo de que este muy borracho. De paso me tome unas copas...no tantas, porque aún tengo comciencia, creo.

-Hola preciosa-me susurro alguien al oido, me volteé y vi a un chico rubio, parecía muy borracho.

-¿Quién eres?-le grité.

-¿Yo? El amor de tu vida-dijo acercandose pero lo abofeté.

-¡Pendejo puto salí que tengo novio!-le grité empujandolo.

-Veni hermosura vamos al cuarto de arriba-dijo agarrandome de la cintura.

-¡Tengo novio estupido!-le pegue y me volvio a agarrar, me toco el culo.

-¡Alejate de mi novia!-escuche a alguien, era Juan.

-Es un borracho-dije y lo abofeté al rubio.

Nos alejamos y subimos a la planta alta, ya que la casa esa era de dos pisos. Me encerro en un cuarto y me miro con una cara picara. Se acerco a mi y me estaba por besar pero lo detuve.

-Juan... ¿Y la apuesta?-

-Me chupa un huevo la apuesta, yo solo quiero estar contigo-susurro en mi oido.

-¿Seguro? Bueno acercate y besame ¿Qué esperas?-

Me beso ferozmente, el beso era hambriento y agresivo pero con amor. Me besó el cuello y puso sus manos adentro de mi vestido, caí en la cuenta de que estaba borracho. Trate de alejarlo pero no podía, me asuste un poco. Me levantó el vestido, me siguio besando y me aferro más a la pared. Quería que parara, si no lo hacía tenía, que tomar medidas agresivas.

-¡Soltame!-le grité

El seguía sin escucharme.

-¡Juan porfavor dejame ir!-me salieron algunas lagrimas.

Como volvió a atacar mis labios, pero al sentir mis lagrimas se detuvo y me miró. Su cara demostraba pena y perdón, estaba arrepentido.

-Yo... soy un idiota-gritó y pateó una botella que estaba ahí.

-No, no hiciste nada malo-dije acariciando sus mejillas pero el se alejó.

-Vete, solo te hago daño-susurró.

-No, no me haces daño-

-¡Que te alejes!-

-¡No Juan todos cometemos errores!-

-Si,pero nada se compara con lo que te hize-una lagrima cayó de su mejilla.

-Te amo-dije abrazandoló.

-Te dije que me dejes-trato de apartarsé pero lo besé.

-Sin ti no estaría viva, no me dejes te necesito-sollozé.

-Puedes vivir sin mi-

-¡No porque yo te amo!-sollozé.

-¡Joder, no llores!-me abrazó.

-¿Por qué? ¿Por qué te enojas de la nada?-

-Me volví a sobrepasar-

-Pero que importa, este no es el momento pero igual todos cometemos errores-

No quiero enamorarmeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora