Cap 13

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Narro yo.

Hoy seria un día importante para el rubio de ojos verdes. Desde hace tiempo esperaba la respuesta del padre a su propuesta para salir juntos, deseaba con ansias pasar unas vacaciones con él; ya sea dentro o fuera de la ciudad.
Caminaba por el largo pasillo de su casa donde el único sonido que se presenciaba era el de sus pasos, de vez cuando jugaba con su anillo entre los dedos a causa de sus nervios, se dirigía a la oficina de su padre.

– Pss Adrien– dijo su Kwami saliendo de su chaqueta– suerte.

– Gracias, Plagg– suspiró– creo que la necesitaré.

Alzó su brazo listo para tocar, por un momento volvió a bajarla; temía de la decisión de su padre. Se armó de valor y tocó. Esperó unos segundos.

– Adelante– dijo una voz del otro lado, la de su padre por supuesto. Abrió la puerta donde encontró su padre en su escritorio tecleando en la computadora.

– Am buenos días, padre– dijo con un poco de timidez– ¿como estas?

– Ocupado– respondió cortante, ni siquiera le dio la mirada al hijo pero Adrien siguió.

– Te quería hablar sobre algo.

– Tendrá que ser luego, necesito terminar la nueva linea para el verano– seguía tecleando.

– No demorare, lo prometo– su padre lo miró. Esa mirada seria ponía los pelos de punta a Adrien, su padre es muy exigente y estricto, con solo verlo te sientes diminuto ante su mirada.

Gabriel suspiró y se levantó de la silla para oír lo que tenia que decir su hijo.

– Habla.

Adrien sonrió.

– Bueno... ¿recuerdas la propuesta de ir a vacaciones juntos?– el padre asintió– pues... Esperaba saber tu respuesta, no necesariamente tiene que ser fuera de la ciudad o el país, tal vez a recorrer una plaza o tal vez...

– Adrien– su padre lo interrumpió con voz seria, Adrien paró y vio a su padre, no sabia lo que iba a decir– me parece que fui claro respecto a esa propuesta– la sonrisa de Adrien desapareció.

– Pero padre...

– No estamos para ese tipo de cosas, Adrien. Tengo una empresa que dirigir, empleados a quien mandar porque si no estoy yo crean desastres, lineas de ropa y pasarelas que planificar y perfeccionar, y¿tú quieres irte de vacaciones? ¿Acaso quieres que mi empresa fracase?– ya era obvio que su padre no aceptó y ni siquiera la considero, Adrien no hizo mas que suspirar.

– No, señor.

Gabriel volvió a sentarse a la silla.

– Además tú también tienes tu responsabilidades; tienes las clases de esgrima, chino, piano y las sesiones de fotos para la ropa nueva. ¿Fui claro?

– Solo... Solo quise pasar tiempo contigo.

La propuesta solo fue perdida de tiempo, pensó Adrien, debió haber adivinado lo que diría su padre. Él tiene su trabajo y no quiere que la empresa tenga problemas por su culpa pero también quería pasar tiempo con él.

¿Tan difícil es querer tiempo con alguien?

– Me parece  que tienes sesión de fotos en 5 minutos– dijo cortante su padre.

– Si, señor– suspiró Adrien con la mirada baja.

– Baja entonces, Nathalie te espera en el auto.

– Con permiso.

Salió de la oficina sin más y bajó al primer piso para ir a la sesión de fotos, después de todo no podía hacer más.

El corazón que no vi - ||Marichat||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora