In love

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Anita, la jefa...Escribiendo

¿Aiti preciosa, puedes llamar a los chicos y conseguirme una cosa como que ya?

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

Hombre Ana ¿qué tal va el plan, algún avance

Anita, la jefa...Escribiendo

Algún avance hemos hecho sí, creo que me queda poco para conseguirlo.

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

¿Y qué es lo que necesitas?

Anita, la jefa...Escribiendo

Prométeme que no me vas a decir nada

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

Me estas dando miedo, qué me vas a pedir

Anita, la jefa...Escribiendo

Una cama y un canapé, de 1,50

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

Ana, ¿te has acostado con Miriam?

Anita, la jefa...Escribiendo

No que va, puede, un poco

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

¿Un poco? Ana no se acuesta uno un poco con alguien y menos si habéis roto la cama

Anita, la jefa...Escribiendo

En mi defensa diré que era de mala calidad

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

No tienes defensa posible Ana, ¿Ya te has encoñado?

Anita, la jefa...Escribiendo

No, que va

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

¿Estas en casa todavía? Dime por favor que no estas en su casa.

Anita, la jefa...Escribiendo

Puede

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

Ana, no te irás a quedar, Ana que si pasas del desayuno nos conocemos

Anita, la jefa...Escribiendo

Y que voy a hacer, dejarla aquí sola durmiendo en el suelo.

Aiti, mi hermanita...Escribiendo

Ana tenías que seducirla, no enamorarte.

Anita, la jefa...Escribiendo

Es que es muy mona Aitana, te prometo que me quedo solo hasta que llegue la cama nueva.

- Con quién hablas, Ana- Ostia que se me ha olvidado decir quién narra...¿Alguna voluntaria? Pero donde están todas, bueno pues lo hago yo hasta que vengan.

-Con Aitana, amor- Miriam miró a Ana una expresión confundida.

- ¿Me has llamado amor?- Miriam intentaba parecer enfadada pero una sonrisa se escapaba de la comisura de sus labios.

- Ha sido un acto reflejo, yo soy mucho de llamar a la gente amor, amor-

- Pues a mí no me gusta que me llamen amor- Ana arqueó una ceja y dió un pequeño beso a Miriam justo donde antes se había dibujado la mueca.

- Perdona, no volveré a llamarte amor- Ana se rió y comenzó a besar a Miriam cuando sonó el ruido del timbre.

-Me cago en todo carallo, quien llama un domingo a estas horas que son las putas 8 de la mañana-

- Miriam, son las 11 y media-

- Ya, pero la gente los domingos tiene cosas que hacer, dormir la mona, ir a misa, echar un polvo con la novia, coño cosas, no se llama a las 11 de la mañana ahí a molestar, y si está una ocupada- Ana se rió, no solo porque sabía perfectamente quien podía estar llamando a la puerta sino que cayó en la cuenta de que Miriam, aunque de modo inconsciente, había usado la palabra novia.

- Ya va, ya va- Miriam se tapó con la sábana como pudo y se acercó a abrir la puerta.

- Una entrega para la señorita Miriam Gallego, dónde lo dejamos-

- Donde dejáis el qué, pero ostia eso qué es-

- Su cama nueva, ¿en qué habitación señorita?-

-Por aquí- La voz de Ana resonó al final del pasillo.

- ¿Y qué hago yo con dos camas? Ana, ¿Esto ha sido cosa tuya?-

- Se pueden llevar la cama antigua, dejen esta aquí y el canapé- Miriam fue apartada por dos hombres que traían un gran bulto cargado. Por dios que mal ha sonado esto, un poco a peli porno de serie B. Es que es meter hombres en un FanFiction de bolleras y ya suena todo sucio...

- Por favor señora, déjenos hacer nuestro trabajo y haga caso a su novia, esta cama que traemos es mucho mejor que esa que tenían- Miriam iba a reaccionar pero Ana le dió un pequeño beso antes de que pudiera decir nada y la cogió por el brazo arrastrándola hacia la cocina.

- Ana, qué ha sido eso-
- Yo pago todo lo que rompo, no te iba a dejar sin cama-
- No tenías que haber comprado nada-
-Cielo es solo un detalle, para mí el dinero es lo de menos y te has quedado sin cama por mi culpa-
- ¿Ahora soy cielo?-
- Tú me entiendes-
- Ana, pero esa cama tiene que haberte costado una fortuna, déjame que te la pague , va a quedarse en mí casa-
- No, además esa cama también la voy a usar yo, es para las dos, a ver si crees que una puede dormir a gusto en ese saco de muelles al que llamabas cama- Miriam sonrió ante la perspectiva de poder tener a Ana en su cama más de una noche.
- Entonces, anoche no fue mal del todo...digo cómo quieres quedarte más días a dormir- Ana se acercó a Miriam con un gesto muy serio y se quedó a escasos centímetros de su boca.
- Lo de anoche, leona, estuvo muy pero que muy bien y yo me quedaría muchas noches a dormir y a no dormir también- Ana besó levemente los labios de Miriam.
- Ana no empieces que tenemos los obreros ahí en el cuarto-
- Ya, estoy deseando que se vayan, pero para dormir. Anoche se nos fue un poco de las manos-
- Has dicho que te gustó Ana-
- Me encantó Miri pero dormir, lo que se dice dormir, hemos dormido poco. Por qué no desayunamos algo y volvemos a la cama-
- Empiezo a pensar que eres una viciosa insaciable Ana-
- Perdone señora, uy yo esto no lo he hecho nunca pero voy a destrozar mi cama porque soy muy pasional-
- uy qué se me ofende la pija-
-Leona te estás pasando-
- Lo siento amor-
- Miriam, ¿has utilizado la palabra amor?-
- No, que va eso sería muy cursi y además solo es la segunda vez que, sería precipitarlo todo-
- Bueno señoras, ya está todo listo, nos llevamos la cama antigua, debía estar muy vieja, menudo susto- se han tenido que dar ustedes durmiendo y la cama partirse en dos- Miriam y Ana se miraron y sintieron esa conexión que se produce cuando consigues comunicarte sin palabras, rápidamente ambas empezaron a reír.

- Sí, un susto muy grande, justo cuando estábamos durmiendo-

- Bueno a mandar, hasta luego señoras que tengan un lindo día-

- ¿Bueno que, Leona, estrenamos la cama nueva?- Miriam levantó una ceja y puso una mirada pícara, soltó la sàbana y Ana fue corriendo tras ella con la sábana en la mano.

- Es comoda, ¿Verdad?-
- Es como domir en una nube, gracias Ana-
- Bueno, yo tengo que irme-
- Vamos Ana quédate, estás cansada apenas has dormido y es domingo. Estar solo el domingo es un asco- Miriam intentó ablandar a Ana poniendo cara de cachorro abandonado.
- No, no me mires así amor...bueno pero solo un rato hasta que descanse un poco- Miriam abrazó a Ana con fuerza y junto su pecho con la espalda de Ana. Poco a poco las dos se fueron quedando dormidas.

- Buenas noches amor- dijo Miriam Mientras se dejaba llevar por el sueño.

Bueno chicas debidos a problemas técnicos ( más bien a qué es muy difícil pensar en deprivación de oxígeno) he estado un poco sin escribir. Gracias a todas por leer y nos vemos por aquí. Puta primavera.

Mente de delincuenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora