La persona toxica

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Estaba yo sentada con el corazón hecho trizas pensando en ese amor por enésima vez. Me enamore de él una vez pero nunca le hable, me enamoré otra vez cuando lo conocí, y me enamoré una última vez cuando estábamos juntos, conocí cada rincón de su corazón, cada expresión facial que nadie más podía interpretar, cada manera de hablar, la manera en mandar sus mensajes de texto, su apariencia física y hasta lo que a él no le agradaba de el mismo a mí me parecía lo mejor que mis ojos hayan visto en su vida.

Éramos tan diferentes e iguales al mismo tiempo. Los dos éramos diferentes físicamente y no teníamos los mismos gustos pero compartíamos los mismos pensamientos, el amor que nos teniamos, el mismo carácter, las mismas ganas de querer estar juntos, y justo fue eso lo que nos hizo separarnos. El hecho de que fuéramos tan iguales a la manera de pensar nos hizo pelear tantas veces que perdí la cuenta de cuántas veces me enojé y te odié. Decidíamos dejarnos de hablar y volvíamos gracias a nuestro carácter y terminabamos regresando otra vez porque al final no podíamos vivir sin nosotros, al final nos necesitábamos, pero no me di cuenta de el daño que nos estaba provocando eso, lo tóxico que era lastimarme a mi misma porque cada que te dejaba y juraba no volver a buscarte o saber de ti me partía el alma, después te buscaba o me buscabas para volver a estar juntos pero al final íbamos a terminar separados.

Una de la veces en la que decidimos dejarnos, con lágrimas en los ojos yo voltie al cielo y me pregunté si será posible sacarlo de mi corazón, yo ya no quería amarlo y sabía que lo nuestro ya no tenía función.

Me enojé, me frustré, y lo odié por no buscarme e intentarlo una vez más, leía y miraba personas que daban conferencias sobre como superarme de una ruptura amorosa, todas me decían que cuando alguien te quiere se nota y cuando no te quiere se nota aún más. Me decían que si necesita tiempo, que está confundido, eran solo pretextos y que yo no necesitaba a alguien en mi vida que me diera las migajas o la mitad. Que yo valía mucho y las personas tóxicas tienen que salir de mi vida. Me decían que no existe persona confundida, ocupada o trágicamente afectada por el pasado, que cuando alguien de verdad te quiere hará lo que sea con tal de estar contigo. Que me deje que comer las uñas si no me quiere no me hablará. Me decían que habrá gente a lo largo de mi vida que estará a mi lado, que cuando diga vamos vaya, que cuando quiera ser escuchada me escuche, que cuando esté sola esa persona estará conmigo pero cuando se vayan que los deje ir, porque no hay persona feliz que este atado a la gente que se va. Me decían que voy encontrar en el camino otra persona que me ayude en el momento más difícil, que le interese de verdad como estoy, si estoy bien, si necesito algo, si estoy triste, o simplemente me quiere a su lado y con un mensaje me cambiará por completo y estado de ánimo, y que si estoy sola entonces que sea yo esa esperanza para cambiar a alguien, porque para alguien nacimos.

No me puse a analizar todo esto que escuchaba, no analicé que enrealidad ya teníamos años intentando estar juntos, que el ya me había demostrado que si tenía interés por mí pero habíamos peleado tanto, nos habíamos hecho tanto daño que era normal que ya no me mostrara ningún interés, era normal que estuviera ocupado y me dijera que necesitaba tiempo, era normal que estuviera cansado de la conexión. Y yo también estaba cansada pero no aceptaba que se fuera, yo todavía quería estar con él aunque conlleve sufrir otra vez y lo único que hacía era odiarlo para olvidarlo. Era tiempo de amarnos a nosotros mismos y ponernos como prioridad a nosotros. utilizaba las conferencias y lo que leía para hacerme saber que no me quería, que no le importaba y que por eso se fue. No entendía que para dejar de querer a alguien se tiene que soltar, agradecer y dejar ir.

Yo tenia el alma tan destrozada que sentía que jamás encontraría a alguien más, me había enamorado tanto que ya no me quedaron ganas de volverme a enamorar porque como él no había dos. Y estaba en lo correcto. Cuando de verdad te enamoras nunca encuentras a alguien como el/ella porque esa persona marco tu vida y todos somos diferentes en nuestro modo.

Entendí que lo único que se puede hacer es aceptar porque esa persona era tan especial que solo yo conocía más las virtudes de esa persona que ella misma. Tenía que aceptar que se ha ido y era hora de continuar con mi camino sola.

Y no pensar que no puedo vivir sin esa persona porque si antes de que lo conociera vivía bien porque ahora que se fue lo necesito?.
Si esa persona hubiera sido la indicada para mí no se hubiera ido, y si lo que no funcionó fue especial lo que Dios o el universo me tiene sera mejor aún, sera lo que ni me puedo imaginar.

Después de meses sin saber de él no estaba triste pero tampoco feliz, sentía que algo me faltaba. Sentía un gran vacío y me sentía sin ganas de vivir. Así de seca me sentía. Me había olvidado de Dios por completo y él nunca me dejo desde el principio, me olvide de Dios mientras era feliz con él y creí que duraría así toda mi vida.

A mi mente le gustaba reproducir una y otra vez los momentos en los que estaba con él. La manera en que me besaba y todos los mensajes lindos que me enviaba, las pláticas hasta la madrugada, y los momentos en los que me sonrojaba cuando me decía cosas lindas.

Sin darme cuenta él era una persona toxica en mi vida. Era tóxico por ya no mostrarme interés y yo era tóxica por no dejarlo, por estar juntos a pesar de nuestro carácter y no dejarnos porque sabíamos que encontraríamos la manera de buscarnos otra vez. Pero no veía que ya no éramos felices, ya no teníamos el mismo brillo que cuando nos conocimos. Nos habíamos hecho demasiado daño.

Y así pasaron los años hasta que nosotros mismos nos cansamos de la conexión, decidimos tomar diferentes rumbos porque muy en el fondo sabíamos que si intentabamos volver a estar juntos lo único que haríamos sería lastimarnos, sabía también que volverías a mí vida, pero cuando nos separamos la última vez y regresaste había pasado tanto tiempo que aunque no quería tuve que soltarte porque me hice de la cabeza que ya era el fin, para cuando regresaste nos hice un favor porque yo cerré el ciclo de nuestras vidas, el ciclo que ninguno quería cerrar.

Esa es una persona toxica. Aquella que te trata con indiferencia porque ya todo acabó, y existe la otra persona tóxica que aunque ya sabe que ya no hay cariño de por medio sigue aferrada a la esperanza de que algún día todo cambiará. Aquella que tiene la esperanza de que todo vuelva a ser como al principio, y se hace daño a si misma.

El tiempo sana las heridas, las heridas nos hacen mas fuertes. Lo que le da sanidad a nuestra existencia es el amor, y el amor no debería de darnos tristeza y dolor.

Definitivamente fue el amor más puro y sincero de mi vida. Se que me volveré a enamorar y talvez encuentre la paz mental con alguien más, pero nunca tendré la confianza y la certeza de tener alguien igual que yo, alguien que se cómo piensa, se cómo va a reaccionar porque el primer amor es lo más puro que hay.

Belleza InternaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora