Parte 21

3.8K 203 23
                                    

Ya regresé! Bueno la pinche imaginación decidió regresar :v
Bueno después de ver tanta telenovela, película y serie decidí por regresar, se que me extrañaron, puercas :v 💕

Bueno ya, mejor sigamos con lo que vinieron.

Sasha

- ¿Que, que pasa? - comento Sasha desconcertada.

- Hoy Sebastián por fin sale del hospital, sanito y vivo, sobre todo sanito - Alex sonreía a no más dar.

- ¿Pero no que había fallecido? - seguía desconcertada.

- ¿Quien te dijo esa idiotez? - Sasha no dijo nada pero señaló a Shock.

- Demonios Shock, solo por qué ahí gente si no ya estuvieras 3 metros bajo suelo - lo miro desafiante y molesto.

- Perdón, quería hacerla de emoción tu vida, de nada hermanito - levanto las manos en modo de defensa y sonrió.

- Está bien, olvídalo, vamos a verlo - me jale Alex con emoción y Sasha camino al compás de Alex seguidos por Shock.

- ¿Cuéntame de el, Alex? - Sasha me miró y después puso una mano en mi pierna derecha, pues me encontraba manejando.

- Es un niño maravilloso, estuve meses rogándole que se dejará curar ese cáncer terminal, cuando acepto, pasó casi toda su infancia en el hospital, el día de hoy cumple 7 años, después de estar los 4 años que no nos vimos en el hospital o bueno puede que más años no nos viéramos, a mejorado muchísimo en ese tiempo, el día de hoy sale del hospital, como un pequeño superhéroe que a logrado salir adelante - sonrió con nostalgia.

- También es un niño inquieto, extrovertido, juguetón, sonriente, necio y coqueto, igual que está idiota de lado - se asomó Shock en medio de los dos asientos del coche y río.

Así que Alex dio el frenon y Shock se estampó en el vidrio de enfrente del auto.

- Yo ya no veo sonrisa de ella más que molestia y enojo con todos - hable riendo ante su actitud de Alex.

- Bueno supieras como fue mi vida durante estos 4 años, no dirías lo mismo - me miró con sus ojos verdes la cual se habían vuelto muy profundos. - Es broma, bueno casi todo - río.

Aveces dicen que entre broma y broma la verdad se asoma.

- Claro, claro - reí nerviosamente.

- Bueno llegamos - dijo Shock sobándose la nariz y la frente a causa del golpe.

Alex bajo rápidamente y me abrió la puerta, pasando yo, ella pasó y dejó que se cerrará la puerta tranquilamente, cuando en ese momento pasa Shock recibiendo otro golpe de parte de Alex, me reí y golpee a Alex por qué sabía que lo había hecho a propósito, a lo que río y me dirijo a la recepción mientras posaba su mano en mi cintura.

- Sebastián Mcdites Agreste, por favor - Alex se encontraba chocando sus uñas con el mueble del hospital provocando el ya conocido sonido y en parte en ella angustia.

- ¿Que es de el? - la muchacha de al menos unos 20 años no le quitaba la mirada a Alex.

- Soy su hermana - la chica que antes le había preguntado se sorprendió ante su respuesta de Alex.

- ¿Su nombre por favor? - escribió algunas cosas en la computadora.

- Alexandra Mcdites Agreste - Alex se estaba desesperando o al menos de eso me percate.

- Está bien, se encuentra en el piso 6, habitación 213 - Alex alzó las manos en forma de decir "gracias dios" y salió corriendo, seguido de mí y Shock.

- Paqueñooo! - Alex hablo alargando la "o" en lo que dijo.

- Ya no soy pequeño - cruzó sus brazos en un intento de parecer enojado.

- Ah! ¿Ya no eres pequeño? entonces si ya no eres pequeño, no te voy a poder llevar a la feria, a comer helado, a comprarte juguetes, no importa ya se con quién si puedo decirle pequeña - miró al niño desafiante y se acercó a mí para después besarme a la cual yo no me resistí.

- No, no, no ¡Si soy un niño pequeño! - hizo un puchero.

- Te dije que era igual de berrinchudo que Alex - Hablo Shock finalmente.

- Tu cállate - Alex lo miro mal.

[[...]]

Después de lo sucedido, los cuatros fuimos a un restaurante para celebrar, que al fin Sebastián habia salido del hospital y fue un niño fuerte que había logrado luchar contra el cáncer terminal.

Los cuatros nos encontrábamos realmente elegantes, los tres se encontraban de un traje negro, Shock tenía una camisa color azul con una corbata azul con plateado, Alex y Sebastián tenían una camisa blanca con una corbata negra, se parecían y mucho, no había diferencia, hasta podrían pensar que aquel niño era su hijo.

- Se parecen demasiado, parecen medre e hijo - reí ante mi ocurrencia.

- Es por qué es mi hijo - lo dijo sería.

- Es broma ¿Cierto? - lo dije nerviosa y preocupada ante que la respuesta fuera un "no".

- ¡Claro que es broma! - Alex río a carcajada y después miró a cualquier lado más que no fuera yo.

Después de ese incómodo incidente todos empezamos a decir malos chistes y a causa de eso reíamos, comíamos y reíamos, parecíamos una familia, una familia muy feliz.

De pronto el teléfono de Alex sonó y Alex decidió por mirarlo, al ver de qué se trataba Alex se levanto de prisa, provocando que la silla rechinara y todos los del lugar nos pusiéramos atentos a ella.

- Voy a contestar, permítanme - Alex se encontraba muy seria algo le pasaba y no sabíamos que.

Alex.

- Bueno, ¿que sucede? - hablo Alex nervioso.

- Tengo tus estudios, necesito que estés mañana a las 9:30am en mi consultorio, esto no te va gustar - hablo el doctor Benjamín ante el teléfono.

- Ten por seguro que mañana estoy allá - suspiro frustrado Alex.

Esto no daba buena espina.

Enamorando A La HeteroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora