ÉPSILON: Dentro Del Videojuego.

CAPÍTULO XIV

El lugar en el que estábamos olía a humedad, encierro y sal. Mis manos me dolían por tenerlas atadas con fuerza en mi espalda.

Sentía como un pedazo de tela me tapaba los ojos haciendo que mi visión sea completamente negra.

Escuchaba fuertes estruendos de cosas destruyéndose y golpeando con fuerza contra paredones, luego oí como una especie de pájaro estaba picoteando contra el suelo de donde nos encontrábamos. Era más que fácil unir toda la información que mis sentidos podían captar en ese momento y formular una teoría.

Solo había un lugar en el que podíamos estar.

El inmenso y aterrador océano.

Pude percibir como un objeto caía con fuerza cerca de mí. Me agite un poco, pero al notar que no había pasado nada más me tranquilice.

Intente soltar mis manos, pero estaban demasiado ajustadas y con tan solo hacer el menor esfuerzo ya me provocaba un doloroso ardor.

Al cabo de un segundo comencé a notar como el resto del equipo "se despertaba", se escuchaban como se quejaban y gemían de la fuerza que hacían para intentar liberarse.

- ¡Maldita sea! ¿Dónde mierda aprendieron a hacer nudos tan bien hechos? - pregunto uno de los chicos. No pude deducir cual de todos fue por la extraña forma ronca en que salió su voz.

Estuvimos unos pocos minutos haciendo esfuerzos sobrenaturales para intentar liberarnos.

- ¡Bingo! - exclamo entusiasmada la barbie. - Estúpidos de Épsilon, no tuvieron en cuenta que estuve en las chicas exploradoras 5 años.

- Penélope no pierdas tiempo y ayúdanos a salir de acá. - contesto Leo nervioso.

Y siguiendo sus ordenes la chica rubia nos desato a todos.

Al sacarme la venda que tenía en los ojos vi que estábamos todos en un circulo amarrados a unas pequeñas sillas de madera.

La habitación era bastante extraña, inquietantes dibujos y escrituras llenaban las paredes, había grandes ventanales en uno de los extremos de la sala redonda que confirmaban mi teoría por la particular vista que tenían.

Estábamos en el mar, dentro a alguna especie de faro.

- No sé cuál es el propósito de esta prueba, pero el salón en el que estamos y la forma en que nos tenían atados me resulta demasiado perturbante- añadió Pol mirando expectante y nervioso a nuestro alrededor.

- Creo que deberíamos investigar un poco. - dijo Luca. - Miranda, Penélope y Pol busquen y preparen la comida, Mia y Leo ustedes analicen los jeroglíficos en las paredes. Yo iré con Verónica a revisar el lugar.

Ya estaba acostumbrada a formar equipo con él, pero igual me sonroje cuando escuche los grupos.

Todos parecían bastante conformes con sus tareas menos Pol.

- ¡Ehh no vale! ¿Por qué ustedes se llevan la parte divertida de investigar y a mi me dejan acá como una nena buscando comida? - gruño el chico de tez oscura.

- Estúpido no jodas, y no sos menos macho por cocinar una puta vez en tu vida. - contesto la barbie dándole un codazo.

Cada vez me caía mejor esa chica.

Con Luca salimos por la pequeña puerta que había en la habitación y nos encontramos con unas largas escaleras de caracol que estaban en un estado desfavorable.

- Bueno, que casualidad, otra vez somos equipo pelirroja. - dijo sarcásticamente mientras me revolvía el cabello.

- Puff... alta coincidencia no sabes. - conteste pegándole un puñetazo amistoso en el estómago.