CAMP ROCK

SEVENTEEN

Estaba a sólo un día del concierto final cuando ocurrió una gravísima mentira. Al parecer, mi hermana había sido culpada de robo, por lo que tocar en el último concierto era un sueño que sólo podía admirar de lejos. Aún no había hablado con ella. Siempre huía de mi presencia, o Caitlyn la tironeaba hasta desaparecer de mi vista. No entendía porqué pasaba eso. El sentimiento de rencor no hacía más que expandirse en mi corazón, Caitlyn no fue más que mi primera amistad aquí, era una total decepción.

—Chicos y chicas —dijo Brown apareciéndose en el comedor. Barron y Sander me señalaron a la lista que llegaba en sus manos.

—Al fin, para lo que tanto hemos esperado —murmuró Lola con satisfacción, chocando su puño con el de los chicos.

—Aquí tengo el programa para el concierto final —continuó Brown—. Lo pondré en la pared y si quieren verla, que sea luego de que yo salga —prosiguió. Cuando terminó de hablar, un grupo de chicas se le acercó, empujándolo.

***

—Adivina quién soy —escuché decir a una voz que realmente me sonaba conocida, y a la vez totalmente encantadora.

Me sobresalté y lancé un suave chillido al aire.

—Estás dentro. Te veo —respondió Shane con obviedad a su hermano, el cual recién notaba.

Suspiré con devoción al verlo tan adorable, parado ahí con su sonrisa y sus ojos revelando aquel niño que aún llevaba en el alma, lo que muchos no tenían.

No escuché respuesta de Jason, aún así no vi que movió sus labios, sólo estábamos mirándonos sin querer. Pareció recordar algo y bufó retirando la vista. Mi corazón se achicó un poco. Ya no tenía esperanzas de nada.

—Yo también te veo —dijo eufóricamente Jason. Suspiró—. Te extrañé —continuó mirando a Shane y luego pasó mirando a Nate—. ¡Abrazo grupal! —los acercó a él y los restregó en sus hombros, haciendo el abrazo más fuerte.

—No somos los únicos a los que extrañaste —tosió Nate y Jason lo golpeó ligeramente.

—No era lo mismo abrazar sólo a Nate —acotó Jason separándose del abrazo.

—Ya lo creo —opinó el susodicho, luego continuó—. Buenas noticias, hermano. Vinieron los de la prensa y cubrirán todo. A la disquera le encanta.

—Oh Dios, que bien por ustedes, chicos —los felicité levantándome del suelo donde anteriormente me había caído. Nate y Jason me miraron tensos y luego miraron a Shane.

—Larga explicación, ya nos arreglamos —les hizo una seña de "les contaré después" y ellos asintieron.

—Bueno, ¿dónde está esa cantante increíble que buscabas? —cuestionó Jason. Lo miré confusa. ¿Cómo rayos se enteró de eso? — ¡¿Qué?! Tengo oídos.

—Esperaba encontrarla esta noche —comentó mi amigo, sonriendo ilusionadamente.

—Eh, pillín —lo codeé cuando Jason se fue al patio de aquella pequeña cabaña.

Seguí a Jason, confundida por su forma de ignorarme. Hoy era el último concierto y se suponía que no debería estar perdiendo el tiempo, pero mírenme, aquí estoy.

—Hey —lo llamé. Él volteó—. ¿Por qué andas tan serio a mi lado? —quizá me deberían llamar chica directa.

—Y-yo... —parecía sorprendido por mi pregunta, ese aire de niño se fue por un momento, ahora lucía como un joven serio y/o maduro—. Me llamaste la atención, pero luego me enteré de tu romance con tu hermano, así que... realmente no debería seguir con una pequeña ilusión. No soy así. Nunca pensé así.

Suspiró con alivio, como si se hubiera quitado un peso de encima. Ese brillo jovial volvió a él y sonrió sinceramente.

—Podemos ser amigos —dijo sacando su celular.

—No tuve ni tendré nada con tu hermano —aclaré abruptamente—. Y obviamente quisiera ser tu amiga.

Saqué mi celular y le di mi número, internamente deseaba que me hablara en algún momento.

—Ahora sí, adiós. Tendré que arreglarme para el concierto —dejé un beso en su mejilla y salí corriendo hacía el lugar donde sería el concierto.

RECIÉN ME DI CUENTA QUE FALTA POCO Y ACABA TO', ESTO ES SOLO RELLENO, WA SUBIR EL OTRO

EL SIGUIENTE CAPÍTULO EL FINAL, AHR