Día número dieciséis

736 36 4
                                    

Pareja: Brick y Buttercup.

|Padres|

16.

–¿Tú eres idiota, Brick? ¿¡Cómo te olvidaste de buscar a nuestro hijo!?– gritó Buttercup– ¿Y si le pasó algo?– miró a su esposo quién manejaba. Rogó por llegar rápido.

–Es un Him, no le pasará nada.

Mientras el pequeño Blake estaba siendo acosado por una niña llamada Risa.

–Es muy lindo él, ¿Tú crees que una mocosa no aprovecharía para hacer algo?– dijo Buttercup.

–Tiene sangre Him, obvio eso le pasará.

–¡Es un niño, ni siquiera sabe bañarse solo!

–No hay amor para la edad.

–Deja, ahora recuerdo que estoy casada con otro niño que ni siquiera sabe cómo es la estúpida frase esa.

–Este niño te enamoró, querida.

–Cierra el pico– miró la hora– ¡Hace una hora salió Blake!– gritó asustada– ¡Ve volando a buscarlo!

–¿Estás loca mujer? ¿Y si alguien me ve?

–¡Blake es más importante! No me importa una mierda si te ven.

–¿Y tú? ¿Por qué no vas tú?

–No sé si recuerdas que... ESTOY EMBARAZADA– gritó– entonces, no puedo ser tan rápida volando.

Brick suspiró.

–Bien. Pero quédate aquí, yo vendré con él.

–Iré manejando hasta allí.

Brick salió del auto y voló lo más rápido que pudo.



–¡Pero Blake, tú dijiste que seríamos novios!– una niña hizo un puchero mirando al niño– Me lo prometiste.

–No sé lo que es ser novios...– la miró curioso.

–Oh, déjame enseñarte...

La niña se acercó a él peligrosa, sabía que si lo besaba estaba arriesgando todo.

Estaba a centímetros, tan solo un segundo y... Lo hizo. Lo besó.

El niño la separó apenas pudo reaccionar.

–¿Que haces?– le dijo– ¡No me gusta!

–¡Blake, hijo mío, ya llegué!– gritó Brick.

–Papá– lloró–, esa niña no sé qué hizo pero no me gustó para nada.

–¿Hmmm? ¿Que hiciste niña?

–Yo solo... Lo besé.

–¿¡QUÉ, QUÉ!?– Buttercup entró como fiera– Niña, ustedes tienen seis años, ni siquiera estás en primaria.

–Pero... pero...

–¡Ese es mi hijo carajo, tenías que ser un Him!– gritó Brick.

–¡Tú cállate maldito irresponsable! Brick, nos vamos– miró a la niña–. Escucha, pequeña, podrás estar con mi hijo cuando sepas logaritmos, trinomio cuadrado perfecto y por qué 2+2 es 5, ¿Bien? Adiós.

Salieron del jardín.

–Oye Buttercup...

–Cállate. No me hagas hablar. Primero te olvidas de venir a buscarlo y después lo apañas para que tenga una novia, eres increíble. Aún no sé porque me casé contigo.

30 días de azúcar, flores y muchos colores.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora