La almirante Nishikino

Capítulo 20: rubí, carmesí?

Empecé a caminar en la oscuridad del pasillo directo a mi camarote, mi mente estaba tan sumergida en lo que Anju-chan había dicho...no creo que sea posible...pensé mientras mis pies se movían involuntariamente en dirección opuesta a la que se fue mi amiga.

"No puedes seguir así!".- aquello provocó que me detuviera a tan solo unos dos pasos de donde provenían aquellas voces.

"Vamos, no empieces Dia".- entonces supuse que mi almirante estaba con su compañera o al menos eso creo yo, Matsuura-san la almirante de Nozomi-chan.

"Como puedes decir eso, si Mar-..."

"Pero no esta! Ella ya no esta!"

Sus voces sonaban tan abruptas que incluso escucharlas hablar así, me sentía realmente mal, la presión en mi pecho me provocaba que no pudiera respirar con normalidad que es esto...susurre sin apartar mi mano izquierda de mi pecho.

"No la vuelvas a mencionar Dia... Mari...Mari ya no esta...".- la voz de Matsuura-san me afligia más, su tono de voz era apagado, triste sin poder alguno, se lo podía sentir, tal vez creo equivocarme, pero son tantas cosas las que ocurren sin tener explicaciones y una de ellas es esta, esto explica por que Matsuura-san es tan estricta, callada y reservada...debio perder a alguien que amaba o apreciaba mucho.

"Sabes que puedes confiar en nosotras...Kanan".- las palabras de Kurosawa-san sonaban tan débiles que me dolía escucharla hablar así, mi almirante... tiende a ser sencilla que...no puede pasarte esto! Dije involuntariamente llevandome las manos a mi boca tratando de suprimir mi sonora voz.

"Quien anda ahí!?"

Muy tarde Kotori-chan...susurre a la vez que salía con la cabeza gacha dispuesta a enfrentar cualquier regaño por parte de mis superiores.

Lo siento!.-me reverencie.- yo solo...me dirigía al camarote...en verdad lo siento!- me disculpe tantas veces como fuesen posibles ante las presentes.

"Tenías que ser tu, Minami-san".- la voz de Matsuura-san, causaban que todo mi cuerpo empiece a temblar del miedo, posiblemente Matsuura-san sea digna de competir con las almirantes de la armada.

En verdad lo siento!- me disculpe nuevamente.

"Esta bien Minami-san, puede retirarse, pero mañana quiero verla temprano en el campo, entendido".- la voz que provocaba que mi corazón empezará a latir como loco, era la voz de mi almirante que con tan solo escucharla provocaba esta reacción inesperada en mi, sin quererlo me sonjore e involuntariamente en mi rostro se formo un sonrisa.

Ha-i~, mañana estare lista Kurosawa-san ...g-gracias...- equivocando me y trabando me pude formular aquellas palabras, sin esperar más retire a mi respectivo camarote dejando solas a mis superiores.

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Sendai (5:30 am)

"Va de nuevo!".- gritaba un mujer de buen físico, logrando así que apenas empezaramos a entrar en calor.

Acabaré contigo Erena! Umi y Rin también me las pagarán!- gritaba lo más fuerte posible a quiénes creía estaban ahí.

"Vamos, solo callate Eli! demonios me las pagarás Honoka!".- disparaba el arma Erena con claras intenciones de herir a mis compañeras.

"Crees que ganarás así de fácil Erena!".- apesar de estar colgada de cabeza en un gran árbol, atada de manos y pies, podía escuchar la voz de Maki, gritar el nombre de mi supuesta "enemiga".