Red Gate [NamJin]

XXXIII

*Morí por bastante tiempo pero acá estamos otra vez jeje, Les he dicho que las adoro?*

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-DETENTE NAMJOON! DETENTE!!! - Gritaba Zico alterado

Los Gendarmes reían al rededor del casino observando la lucha que estaba a flor de piel.

-TE MATARÉ! JURO QUE TE MATARÉ HIJO DE PUTA, LO SABIA SIEMPRE SUPE QUE ERAS UN BASTARDO ASQUEROSO, SIEMPRE LO SUPE DESDE LA PRIMERA VEZ QUE TE VI CON ESA CARITA DE IMBÉCIL

Zico y Jay sujetaban a la Bestia mientras Bang YongGuk reía a carcajadas unos metros mas allá.

-Oh mierda hace años que no me divertía tanto - Murmuró tocándose las sienes

SeokJin se hallaba en el piso llorando y aún en Shock, no podía creer nada de esto, si bien Namjoon no le había tocado un pelo su mirada le lanzaba puñaladas directas al pecho.

-Nam..j... - Intentó pronunciar el heredero

-Cierra... la boca.

Solo tres palabras bastaron para que todo el mundo de Jin se derrumbara, ese tono, esos ojos, ese rostro manchado de sangre ajena, esos puños apretados...

Todo fue mi culpa... todo esto, yo provoqué todo esto... lo siento...

Pero era tarde, los golpes resonaban en sus oídos, la sangre salpicaba y Namjoon se revolcaba por el piso con Wook mientras Hansoo y Ryan luchaban a la par con Zico y Jay.

Kim Seokjin permanecía petrificado tirado en el piso, su vista se nublaba sin embargo notó como Bang YongGuk cogió el cuerpo golpeado de MinHyuk de la ropa y lo arrastró a un lado sin quitar la sonrisa de su cara.

-Que demonios estas planeando, por que... lo dijiste?...

Los Gendarmes se metieron a la pelea y con sus garrotes noquearon a Nam, Zico, Hansoo y Ryan, no fue necesario noquear a Wook ya que Joonie lo dejó casi inconsistente con el rostro desfigurado y sin dos dientes y Jay no estaba tan descontrolado como para noquearlo. Fueron llevados a celdas aisladas mientras los demás internos volvieron a sus aposentos.

-Seokjin... levántate - Susurró YongGuk ofreciéndole su mano.

-Tu...

-Vamos, levántate...

-Por qué... lo hiciste?, sabias que esto pasaría... que mierda quieres...

La pregunta pareció causarle interés, retiró su mano y se agachó para encontrar los ojos de Jin.

-Quiero ver... El infierno...

Que está por Comenzar.

Una hora antes

Las celdas se abrieron por segunda vez en la jornada, a lo alto las ventanas dejaban entrar la luz gris del frío día que se estaba viviendo en Seul, los internos salieron al casino con sus compañeros de celda como era de costumbre, Jin había discutido con Namjoon hace unos minutos gracias a las insistencias del heredero para modificar la ruta de escape en el plan, puesto que Minhyuk se uniría a ellos si todo salia bien y era muy riesgosa una huida en fila.