29) Yo trato de ser el ultimo

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Melissa Hunter.

Acababa de despertar, Liam aun seguía durmiendo, vi la hora, 8:00 am, puse una pierna encima de la de el y lo abracé.

—Mi amor—Intente despertarlo—Amor—Dije nuevamente, abrió sus ojos—¿A que hora entras hoy?—Le pregunté.

—Mi primera clase es a las 11:00 am—Dijo con su voz ronca.

—Sigamos durmiendo—Dije ya que mi clase comenzaba a las 10:00 am, se volteó y me acercó hacia el por mi cintura.

—¿A que hora la tuya?—Dijo con los ojos cerrado.

—10:00 am—Le dije pasando mi mano por su cabello.

—¿Y que hora es?—Preguntó.

—Apenas las 8:00 am—Dije sin sacar mi mano de su cabello.

—Si, sigamos durmiendo—Dijo dejando su mano en unos de mis pechos, sonreí y cerré mis ojos sin dejar de acariciar su cabello.

Desperté nuevamente gracias a la alarma, supuse que eran las 9:00 am, así era, me levante con cuidado para no despertar a Liam, me puse una hoddie de Liam porque hacia un poco de frió, camine al baño y lave mi cara.

Fui a la cocina para preparar mi desayuno, escuche la puerta sonar, extrañada con saber quien era la abrí.

—¿Te desperté?—James dijo, sonreí y negué.

—¿Que haces aquí y como sabes que vivo aquí?—Le dije dejándolo entrar.

—Tu hermano me lo dijo, también dijo sobre lo del bebe—El dijo, no dije nada y cerré la puerta—¿Pensabas decirme?

—Si, pero en el momento no quería hablar con nadie sobre eso, disculpa debi habértelo dicho—Me disculpe.

—Esta bien, pero yo te advertí que ese de hijo de puta era el diablo—Dijo un poco fuerte.

—Shh—Le dije que guardara silencio para que Liam no despertara.

—¿Estas con el?—Me preguntó.

—No, es Liam, aun está durmiendo—Dije y el suspiro.

—¿El Profesor Smith esta aquí?Preguntó, reí por su expresión.

—Si—Reí, camine para seguir haciéndome el desayuno.

—Solo venia para decirte si es que mañana iras a eso de la reunión con los chicos ¿Iras?—Me preguntó.

—Si ¿Y tu?—Le pregunté y el asintió.

—Pero no lo tengo claro, ira Melinda y no quiero verla—Puse mis ojos en blanco.

—Nunca entenderé lo que paso entre tu y ella—Dije tomando un poco de mi cafe.

—Lo que paso...—Comenzó a hablar.

—Seguiré sin entender, ella era la razón de nuestras peleas, me da igual—Dije interrumpiendo y el río.

—Sabes, estoy conociendo a alguien—Me menciono.

—¿En serio?—Me alegre por el.

—Si, y creo que podría ir a serio—Dijo sonriente.

—Se nota, tienes un brillo en tus ojos al hablar de ella, aunque no creo que supere el brillo que causaba yo—Bromeé.

—Si, no lo creó—Me siguió la broma, James y yo nos habíamos convertido en muy buenos amigos.

—Me esperas, me hire a cambiar y me llevaras a la universidad—Le dije y el asintió sonriente.

Mis tres amoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora