#3 - Unpredictable

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—¿Ashton Irwin? —gritó Sasha desde el otro lado de la pantalla—. ¿Así como EL Ashton Fletcher Irwin, baterista de 5 Seconds of Summer?

Me tapé la cara con las manos. No podía dejar de reír. 

—Por cuarta vez, Sash, ¡sí!

—¡Somos unas genios! —acompañó Anna—. ¿Eres consciente de que es el chico más lindo de Sídney?

—Eso es mentira.

Para mí, el más lindo era Luke.

—¡Como sea! —Sasha nos mostró un panfleto que anunciaba que éstos chicos se presentarían en el campus del instituto el pasado septiembre.—. Míralo, ¡es una celebridad!

Me llevé las manos a los ojos, haciéndole burla.

—Bien, técnicamente no es una celebridad aún —argumentó Anna—. Pero sí, es muy conocido en Sídney.

Sasha sacó el panfleto del lente y volvió a hacerse visible en la videollamada.

—¿A qué hora mañana?

Yo arqueé mi ceja en señal de incertidumbre.

—¿Si es a las siete, les parece a las cinco? —contestó Anna. Fue entonces cuando entendí la referencia.

—No estarán pensando en...

—¡Ni pienses en echarte atrás ahora, rompecorazones! —discutió la rubia.

─Pero, chicas, no es mi ambiente, saben que...

—¡Nada de peros! —se unió la castaña.

Suspiré. 

—No creo que sea lo correcto.

—Oh, no, la moralidad —Sasha se levantó de su asiento y caminó lejos de la videollamada exclusivamente para que no pudiéramos verla.

—No quiero incomodar a Luke en su noche especial.

—¿Sabes cuál es el problema? —dijo Anna—. Piensas demasiado. Le has dejado el camino libre para que te ignore y ahora que puedes hacerte notar no quieres. Hazlo por Ashton.

—A mí no me interesa Ashton, lo saben —refuté, un tanto molesta. 

—¡Maldita sea! —Sasha exclamó y volvió a su lugar—. Ashton no quiere estar en nada serio con nadie, pero Luke sí, y su tiempo con Lacey está llegando a su fin. Hazlo por Luke.

—Creo que a ninguno de los dos realmente le importa que yo esté ahí...

—Bien, hazlo por nosotras —mencionó Anna con un tono determinante y la expresión más seria que vi desde que la conozco, de tal modo que logró asustarme—. Me muero por ver a Calum en concierto, y ustedes no van a impedírmelo —confesó, enarcando una ceja. 

Sasha echó a reír. 

—Sabía que te gustaba Cal, ¡mentirosa!

Anna se cruzó de brazos, volviendo su vista hacia mí. 

—¿Y bien, Hailey, harás esto por mí?

Estaba a punto de responder que me preguntaba quién hacía algo por mí, hasta que vi mis mechones con tintura. Ugh.

Tiré mi cabeza hacia atrás.

—Está bien, a las cinco.

...

Me encontraba leyendo un libro en la galería del jardín de mi casa, cuando un portazo me tomó por sorpresa.

"¡¿Que hiciste qué?!", se escuchó lo lejos, como si fuera una discusión. Cerré mi libro y le avisé a mi mamá que regresaba en un segundo. Nunca supe si efectivamente me había oído.

Mixtape #1, lado A {lrh} // EN EDICIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora