Your baby, he's mine. ➡ HunHan

Fünfzehn

- Lo siento, Chanyeol. Nunca quise ocasionar estos problemas, nunca quise... Corromper a tu bebé de esa manera. - SeHun se llevó la mano a la parte trasera del cuello para mantener las manos ocupadas. - LuHan es tu pequeño bebé, pero también es mío.

Chanyeol apretó los puños y dejó salir un gruñido bajo. Su mente no hacía más que enviarle recuerdos de su pequeño bebé, cuando nació, cuando empezó a caminar, cuando lloraba por todo, cuando jugaba con sus juguetes en el jardín, cuando empezó a salir con sus amigos, cuando los chicos empezaron a llegar a su casa como polillas a la luz. Y entonces, sólo podía ver a LuHan, pequeño y frágil, sujetando la mano de SeHun con fuerza, y con un sonrisa dulce en su joven rostro. Entonces movía la mano de izquierda a derecha, y ambos caminaban lejos de él.

Sus piernas temblaban y su labio inferior también. Rápidamente se sentó en el sofá más cercano y cerró los ojos con fuerza para evitar las lágrimas.

— No quiero que te preocupes, Chanyeol — escuchó decir a SeHun. — Él estará a salvo, justo aquí. Conmigo.

Chanyeol negó con la cabeza. No podía aceptarlo, no podía dejar que un hombre del doble de su edad se lo llevara. No, eso lo convertiría en el peor padre de todos. Aún si LuHan lo odiaba, se lo agradecería algún día.

— No lo entiendes, SeHun. — habló al fin. — Ese niño... Es lo más importante que tengo, además de Baek. — miró fijamente la foto enmarcada arriba de la chimenea. — No me estoy negando porque no quiero que esté contigo específicamente, sino porque eres muy mayor para un niño de 17 años, y porque quiero que viva una vida libre y llena de nuevas experiencias por su cuenta. Cuando tenga que ir a la universidad, quiero que lo afronte solo y con madurez. Quiero que crezca en todo sentido, pero no lo hará si estás ahí para ayudar.

» Lo he protegido todos estos años, y su inocencia exagerada, su comportamiento infantil y su inmadurez ha sido el resultado. Pero no me arrepiento. Cuando se haya ido, no podré seguir protegiéndolo, así que simplemente decidí hacerlo mientras está en casa, conmigo y con Baek.

Chanyeol suspiró — Sabes que le daría el mundo si me lo pidiera. — dijo. — Pero lo correcto es dejarlo volar por sí mismo. Y no será posible si tú estás ahí, protegiéndolo como yo. Quiero que sea un chico independiente, ¿lo entiendes?

SeHun se dejó caer en otro sofá y se cruzó de brazos. — Claro que lo hago, Chanyeol. Lo entiendo, pero... Tal vez pueda ser todo lo que quieres... Conmigo a lado.

— SeHun, él ni siquiera puede abrir el envase de la jalea, ¿en serio crees que va a dejar la dependencia de la noche a la mañana?

— No. Supongo que no, pero no perdemos nada intentando.

— Baekhyun jamás aceptará. Se mataría a sí mismo antes de decir que sí. Tú lo sabes, Baekhyun desearía traer la universidad aquí en vez me enviar a LuHan lejos.

— Él te escuchará.

— ¿Quién dijo que yo diría que sí? Tiene 17 años. En todo caso, no deberíamos hablar de esto ahora. Tal vez al año que viene. — Chanyeol se puso de pie para irse a la cama.

— Chanyeol, no podemos retrasar esto. ¿Qué le diré a LuHan mañana?

Chanyeol paró en las escaleras para mirar a SeHun sobre su hombro. — Dile que no he querido hablar del tema. Fin.

— Chanyeol...

— Por favor, SeHun. Sólo déjalo por ahora, ¿quieres? Estoy cansado. Si quieres puedes quedarte a dormir. — y se fue.

Abrió la puerta de la habitación de su hijo y lo vio acurrucado en medio de la cama. Entró con sigilo y se tumbó alado de él, lo rodeó con los brazos y le dio un beso en la cabeza.