*Lucas
Sebastián estaba volviéndose verdaderamente loco; no soportaba que Roxie rechazara salir a pasear con él porque se citaba con las locas de Karen y Lucy o, lo peor para su ego, que también saliera con el “cabeza de zanahoria”, como había bautizado a Mark.
-¿Qué le pasa? –se queja por millonésima vez, pasándose las manos por su mata negra- Me parece perfecto que lo haya perdonado pero no por eso tiene que salir con él, y menos en los días que normalmente salimos nosotros
-Deja de torturarte por eso –me estaba comenzando a irritar por no obtener buenos resultados al intentar tranquilizarlo- Le prometiste a la pequeña Roxie que tratarías de hacerte su amigo, ó mínimo portarte cordial
-¡Lo intento! Pero se gana a pulso mi odio –no puedo evitar reir ante el gesto exagerado en su rostro, sabe que le pueden ganar terreno con su azabache si no se pone las pilas- ¿Quién se cree para invitarla a salir?
-Roxie puede salir con quien quiera mientras no tenga novio –remarco la ultima palabra y parece captar la indirecta pero, como siempre, la ignora- y, aunque tenga, saldría con sus amigos de igual manera. Te lo repito: deja de mortificarte, tambien ha salido con nuestras hermanas
-¡Por Dios, Lucas! Son amigas, se cubren entre ellas
En eso tiene mucha razón, las amigas, en especial ellas; comparten miles de secretos, se cubren las espaldas y si te metes con una, te metes con las tres. Y lo sé por experiencia, una terrible experiencia que me costó ir maquillado por todo el colegio hace unos años.
Algo me dice que Sebastián tiene razón… pero estoy seguro que no es a Roxie a la que las chicas están cubriendo.
***Roxie
-¡Gracias, gracias! –decía la más pequeña de las tres- Hoy fue una de los mejores días de mi vida
-No agradezcas primita –dice Karen- Para eso estamos las amigas
-Ella tiene razón –agrego con una sonrisa calida en mi rostro- Asi que cuéntanos ¿qué pasó?, con lujo de detalles
Y así pasamos toda nuestra tarde, ella contándonos con una deslumbrante sonrisa la tarde que pasó con Mark y nosotras derritiéndonos en suspiros ante las cosas tan lindas que nos fue relatando. El pelirrojo le había confesado que cuando se fue a Italia, la extrañó mucho y que contaba los días que quedaban para regresar a su lado.
-Entonces me dijo que cambió porque a cada momento recordaba como solo yo había sido quien le ofreció una amistad de verdad –una sonrisa típica en los enamorados apareció en su rostro, me hiso tan feliz verla así- Además me pidió una oportunidad para dejarlo demostrar que es el chico ideal para mí; ¡estaría dispuesto a hablar con Sebas! –ella y Karen soltaron un gritito de emoción
-Amiga, no sabes cuánto envidio tu suerte –le digo con una sonrisa triste- Lo que yo daría porque cierto tarado me quisiera así
-Sabemos que Sebas te ama –me asegura mi rubia coqueta abrazándome- Pero tú lo has dicho: es un tarado.
-Veras que sí, a mi hermano tiene que quitársele lo estúpido antes de que pueda perderte
Con sus palabras se unió a nuestro abrazo y sin motivo alguno empezamos a reír.
-¿Dejaras que hable con tu hermano? –pregunta Karen momentos después- ¿Ó seguiremos siendo tus chaperonas por un tiempo más?
-Por el momento creo que será mejor si todo sigue así –Lucy se encoge de hombros- Sebas aún anda un poco raro por su llegada y dudo mucho que vaya a tomarlo bien
-Es normal, eran rivales de amores en el colegio –canturrea la rubia- Aunque ahora Roxie puede encargarse de mostrarle a Sebas que es toda suya –se enrosca uno de sus chinos y me dedica una sonrisa picara
-¡Pervertida! –le lanzo un pequeño cojín azul- Pensándolo bien, no me importaría encargarme de ese asuntito –bromeo “seductora” y volvemos a reír, después de unos segundos pregunto:- Y ahora solo falta una cosabpor contar Lucy
-¿Cuál? –pregunta ligeramente confundida
-¿Hubo besos?
-¡Roxie! –me reprende con las mejillas teñidas de rojo
-¡Dinos, dinos, dinos! –suplicamos
-Unos cuantos… -ríe entre dientes y, sin dejar hablar a Karen, dice:- Si, besa como los dioses
Aquella pregunta es típica en su prima y siempre reímos a carcajadas después de eso, viejos recuerdos vienen a nuestra mente. Nos unimos en un abrazo y terminamos tiradas fuera de la cama, con nuestra vista hacia el techo y suspirando. El sueño nos vence minutos después.
![](https://img.wattpad.com/cover/1531758-288-k958015.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Mi niña
RomanceÉl la ama y ella lo ha notado; ella lo ama y él tambien lo nota... ¿por qué no están juntos? Ninguno de los dos se atreve a decir en voz alta lo que sus acciones revelan desde hace años