"La fantasía es la única arma en la guerra contra la realidad."
Ella era mágica y no había mentira en su fuego, era una chica triste, pero con un espíritu indomable, opacado por un pasado oscuro que debía superar.
Estaba dispuesta a empezar de cero...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Las gotas de agua caían chispeantes en la acera, mientras ambas hermanas recorrían las calles de Toronto como parte de un paseo sabatino. Llegaron a un restaurante cerca del centro y decidieron entrar, cerraron el paraguas y se quitaron sus abrigos para ponerlos en el respaldo de la silla. Tomaron asiento y contemplaron el lugar, el decorado era espléndido y les agradaba el ambiente.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿Qué van a ordenar? — preguntó amable la mesera.
—Yo quiero un plato de espaguetis con albóndigas— dijo la pequeña Nevaeh.
—A mí me da el especial de pechuga de pollo con arroz y ensalada por favor—masculló Grace mientras observaba la carta y movía sus pies por debajo de la mesa.
—Bien— mencionó la mesera escribiendo en el bloc de notas—¿Algo de tomar?
—Jugo de naranja para la niña y para mí una limonada.
Luego de un considerable lapso de tiempo, la mesera entrego la orden que las hermanas encargaron, ambas agradecieron al momento en que la mesera se retiraba y comenzaron a degustar su comida en silencio.
En cuanto las dos concluyeron sus alimentos, empezaron una plática en la que Nevaeh intervino primero para contar su sueño del día de hoy.
—En mi sueño había un gran bosque y hadas muy amables que nos llevaron al lindo castillo para que la malvada reina no pudiera encontrarnos, también había un chico alto muy guapo de tu edad y su hermano, no entiendo qué hacían ahí pero así fue mi sueño— comenzó a relatar.
Las palabras que pronunció Nevaeh realmente eran muy ficticias, pero Grace no quería quitarle el don de tener una gran imaginación, así que solo continúo asintiendo ante la historia y siguió la corriente.
—Tal parece que tu sueño fue muy interesante ¿Qué más sucedió? — comentó Grace con cierto interés.
—La primera vez que lo soñé estábamos solo tú y yo dentro de un bosque y luego de la nada estaban ellos, las hadas aparecían poco después para capturarnos creyendo que éramos malos y luego todo era borroso ya que desperté— musito Nevaeh quien se veía algo afligida.
