XIV.

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El día que conocía a Thai supe que iba a ser una amenaza. Desde el momento en que observé como miraba a Carter y como él empezaba a corresponder a esa mirada, desde ese momento, entendí que todo por lo que había estado trabajando, estaba a punto de irse al demonio.

Carter siempre tuvo en claro sus prioridades y una pareja amorosa no entre ellas. En un principio me preocupaba que eso llegara a cambiar en él, después de todo, siempre fue muy popular, pero en verdad nunca parecieron importarle ese tipo de cosas. Aún si se le confesaban el nunca correspondía a los sentimientos de los demás, fuese quien fuese.

Conozco a Carter mejor que a mí misma. Sé su fecha de cumpleaños, siempre la recuerdo y nunca se me ha pasado darle un regalo, sé su color favorito- azul marino-, su comida favorita-carne encebollada con arroz- y la que odia- el pulpo-, sé cuál es el tipo de música que más le gusta- rock clásico de los 80's o 90's- y la que detesta- la música disco-, todo. Me atrevo a decir que ni si quiera Percy lo conoce tan bien como yo. Por último, sé que él sólo me ve como una hermana... Sin embargo, nunca he podido saber cómo piensa, su manera de ver las cosas es muy diferente y su mente es difícil de descifrar, pero bueno, tiene sentido, Joe lo entrenó para ello, así que de alguna forma mantengo la mínima esperanza de que algún día le llegue a gustar.

Me propuse cambiar su forma de verme. Comencé a trabajar duro para llamar su atención, aunque aún no ha resultado. Le mandaba indirectas tratando de decirle que me gusta, pero nunca las capta, supongo que con él no funcionan ese tipo de cosas. La única opción que me queda es confesarme directamente. El problema es que sé cuál será su respuesta y para ser sincera, tengo miedo de escucharla.

Claro, no me doy por vencida todavía, no soy de las que se rinden tan fácil.

Pero de repente llega este omega con su cara de inocente y sus ojos de niño bueno y ¡se lo empieza a ganar! Definitivamente no pienso perder, pero de cierta forma creo que me encuentro en desventaja por ahora.

¡Y ahora Carter me pide que le ayude en el entrenamiento de combate del novato!

Después de pelearnos el día que llegó Thai, Carter se disculpó conmigo y me pidió que le ayudara a entrenar al chico.

Mi única debilidad, diría que es Carter, nunca he podido negarme si se trata de él, así que sí, accedí a ayudarle en el combate, sólo si el omega lograba pasar una prueba de valor que le haré.

Se preguntarán por qué, pues necesito ver hasta dónde puede llegar, que tanto coraje tiene, y con base a eso, veré que técnicas puedo aplicar con él. Mis entrenamientos son de alto rendimiento, exprimo hasta la última gota de energía que tengan y más. Mi técnica es el miedo, utilizo la adrenalina generada a través de él para que mejoren su rendimiento físico y que puedan controlarse en mente y cuerpo. Este tipo de entrenamiento se aplica una vez al mes en todos los escuadrones y el que no logre completarlo es enviado con un mediador. Yo soy de las pocas que sabe utilizar este método, mi padre me lo enseñó desde muy joven y gracias a eso tengo un excelente control sobre mi cuerpo. Por ello, le debo aplicar la prueba de valor. Para ser sincera, sus resultados en las pruebas fueron patéticos, el chico no aguantaría ni 5 minutos conmigo y no creí que Carter lo enviaría a las ligas mayores tan pronto.

El Capi se molestó de que le tuviera que aplicar la prueba, pero ni modo, son mis métodos y si quiere que le ayude tendrá que adaptarse, no hago excepciones con nadie.

En caso de que el novato no acepte, no lo obligaré, y si no pasa la prueba, significa que no está listo, así que no podré entrenarlo.

Y bueno, en conclusión, es por eso que estoy aquí parada frente al cara de mediocre que acaba de abrir la puerta.

PROYECTO OMEGAVERSEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora