Outside Next Door ©

Prólogo

En el futuro, cuando el planeta no pudo ser más habitable, la vida quedó extinta a excepción de los humanos.

Al buscar otra alternativa de vida, los científicos investigaron la posible vida en otro planeta o en cualquier parte del universo. Pero al acabarse los recursos fue imposible continuar con el proyecto.
Tal vez te preguntarás, ¿Cómo es que llegamos hasta aquí? La respuesta es muy simple.

El ser humano, desde que tuvo el poder sobre la Tierra la ha manipulado para mejorar sus condiciones de vida y evolucionar, utilizando los recursos que tenia la naturaleza para brindarle sin importar qué podría pisotear en su camino.

Como era de esperarse, el humano alcanzó una posición alta convirtiéndose en el amo de todo.
Con el paso de los años fue evolucionando la forma de vida y con ella las nuevas oportunidades de crecimiento: la tecnología.

Cuando esta fue creada, la especie humana—la que alguna vez predominaba— se convirtió en dependiente e ignorante de lo que pasaba a su alrededor. La necesidad de obtención y consumismo llevó a los seres humanos a adoptar nuevas conductas.

La contaminación llegó, la sobrepoblación y la extinción.
El planeta se encontraba en una crisis imparable. Guerras eran iniciadas por la obtención del agua, la comida escaseaba y había muchas más bocas que alimentar. Las tasas de mortalidad aumentaban de una manera increíble y las epidemias no tardaron en manifestarse, y con ellas, la creación de nuevas enfermedades para las curas casi nulas.

Se pensó que la situación no podía empeorar.

Pero lo hizo.

Una llamarada solar azotó al planeta Tierra terminando de a poco con la naturaleza y agotando lo que quedaba de la capa atmosférica, permitiendo el paso de la radiación solar.

La humanidad se había vuelto vulnerable una vez más, a la naturaleza.

La extinción de todo no tardó en llegar, llevándose las plantas y los animales con ella.
Casi llevándose a los humanos.
Por suerte, eso no ocurrió.

Una mente brillante propuso la idea de depender completamente de la vida virtual. La desesperación reinó las mentes de las personas.

Entonces el Sistema DL nació.
Ofreciendo la oportunidad de continuar con la vida de aquellos pocos sobrevivientes en la Tierra.
Un domo electromagnético diseñado con imágenes virtuales cubría y separaba la comunidad de Danville para hacer posible la vida dentro de él.

La radiación solar tomó todo el mundo. Todo el mundo menos Danville.

Pero para vivir en ese lugar, ciertas reglas debían seguirse:

1. Para evitar el contagio, independientemente de si existiera o no, la comunicación sería virtual.
2. A cada habitante se le asignaría un avatar para su cuidado.
3. Los viajes virtuales se llevarían a cabo.
4. Nadie cruza el Domo.

El Antiguo Mundo ha quedado atrás.

¿Dónde está Dios?