—¿Lo estás diciendo en serio?—susurró Malcom cerca de mi oído.Nos encontrábamos escondidos en una esquina de la pared, esperando el inicio de mi plan. Y Malcom, no dejaba de estar nervioso.
—Sí, así que cállate y sígueme el rollo.
Me asomé un poco para ver si venía esa persona. Y al sentir sus pasos acercándose más, me giré hacia Malcom.
—Tú tapas sus ojos y yo la boca. Después golpéale con un puñetazo para dejarle inconsciente.
El rubio parpadeó mirándome como si todo aquello fuera parte de su imaginación y no la realidad.
—Estás loca.
—Lo sé, gracias—sonreí y después me giré de nuevo preparándome mentalmente para el plan—Ya viene, venga.
El chico a mi lado suspiró con los hombros tensos y asintió con la cabeza. Estuve atenta a cada movimiento del sujeto que se acercaba. En cuanto llegó el momento, Malcom y yo entramos en acción.
El rubio, tal y como le dije, tapó los ojos del hombre que logramos atrapar con rapidez, mientras que yo le cubría la boca. El sujeto no dejaba de moverse de un lado para otro, completamente asustado, hasta que Malcom, sin apenas pensarlo, le dio un puñetazo tan fuerte, que no me sorprendió en absoluto el hecho de que el hombre—que quizás era o un especialista en medicina, o un científico—que teníamos entre nuestros brazos, cayera inconsciente.
—Te has emocionado un poco—comenté asombrada.
Malcom tragó saliva y se rascó la nuca.
—La verdad, es que me puse histérico.
Reí.
—No sé si es algo bueno o malo—dijo y después centró su atención en la puerta del laboratorio para después regresar su mirada hacia mí—¿Y ahora qué?
—¿Ves esa cámara?—asintió con la cabeza—Necesitamos la cara de éste hombre para que se abra.
—Oh—ladeó su cabeza observando al tipo que dejamos tirado en el suelo—¿No te preocupa cuando se despierte?
—Le dejaremos al lado del laboratorio. Si nadie se entera de que estuvimos aquí, él se rayará con el tema y nos olvidará por inseguridad a sus recuerdos.
Malcom sonrió.
—Reese, eres una genia.
—Gracias, electro-boy—le devolví la sonrisa.
Bufó frunciendo su ceño.
—¿April?
—Pues claro. Me hizo gracia su apodo hacia tí.
—Olvida ese apodo—rodó sus ojos y cogió al hombre por sus brazos—Hagámoslo rápido, antes de que a alguien se le ocurra venir hacia aquí.
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INEFABLE © 2018 (sin editar)
Science FictionLa vida en el año 2089 ha cambiado completamente. Todo ha evolucionado, y no solo la tecnología y la ciencia. También los humanos. El 90% de la población mundial está compuesta por humanos genéticamente normales. Sin ninguna modificación ni alteraci...