2 Dolores de cabeza

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El último año escolar pasa sin incidentes. Los dolores de cabeza de mamá han desaparecido o los oculta. He bailado en varios recitales, con mamá y papá asistiendo. Papá todavía no termina de aprobarlo, y sin duda mira los solos abiertamente sensuales de las otras chicas. Sin embargo, sabe que soy talentosa y esto le agrada. Bailo durante el verano, y conozco a Cheryl y a Lisa y a algunas de las otras chicas del estudio. Papá me deja salir con ellas mientras me reporte con regularidad. En su mayor parte, no hacemos nada más que pasar el rato en el centro comercial y ver televisión femenina en la casa de Cheryl. Los chicos vienen unas cuantas veces, pero ninguna de nosotras le dice nada a los adultos. Cheryl es una chica atractiva, apenas mide 1.50 y ni siquiera pesa cien libras. Tiene el pelo rojizo y ojos marrones y es una fiera, enérgica, ardiente y abierta. Casi tiene que correr a su casa ya que sus padres trabajan todo el tiempo. Por lo que sabe papá, somos solo Cheryl, Lisa, las cursis películas de los 80 como Flash dance y Footloose y Las Chicas solo quieren divertirse y yo.
Él no sabe nada de las fiestas que, de vez en cuando, Cheryl hace los fines de semana, mientras que sus padres están en Bergen o en otro lugar por negocios. En comparación con las historias que escucho en el Hartvig Nissen, estas fiestas suelen ser bastantes tranquilas, en su mayoría las mismas veinte personas, algunas chicas del estudio de la señora Guetta, algunos chicos del equipo de fútbol y algunas chicas del programa de baile del Central. Los demás toman cerveza y hacen shots de Whisky que alguien trae, pero yo no. Papá olería alcohol en mí antes de que llegara a casa. Probé cerveza una vez, pero era desagradable. Tomé un sorbo de whisky y casi me ahogo. Me atengo a la Coca-cola y divertirme viendo a los otros actuar como idiotas.
En una de estas fiestas, al final del verano, me encuentro sentada en la terraza detrás de la casa de Cheryl, viendo como seis o siete chicos borrachos juegan un ruidoso partido de fútbol callejero, las chicas animando emborrachándose. Una de las chicas de baile del Central se sacó su camiseta, el sostén es rosa brillante en la oscuridad de la noche. Estoy avergonzada por ella ¿Cómo podría estar bien así, medio desnuda, sabiendo que cada individuo en la fiesta la miraba? Quiero cubrirla. Varios chicos dieron con ella, tratando de conseguir que vaya adentro con ellos, pero parece defenderse sin esfuerzo retirándose sin herir sus sentimientos. Ella está claramente borracha, bailando con la música que suena en los altavoces portátiles del iPod de Cheryl.
Tiene sus manos en su pelo, amontonándolo hacia arriba en la parte superior de su cabeza. Retorciendo sus caderas al ritmo de la música, girando en su lugar poco a poco, girando sus caderas, su piel bronceada intermitente bajo la luz de la luna y la luz amarilla pálida de la casa.
Todo el mundo está mirando. Todo el mundo. Ella es una bailarina, sabe lo que está haciendo. Sabe que tiene su atención. Desliza sus manos sobre su vientre, sobre sus caderas, empujando la cintura de sus pantalones vaqueros ajustados. Su baile ha adquirido vida propia, girando, arroja el pelo alrededor empujando y moviendo sus caderas.
Cada movimiento es provocativo. Los chicos están congelados y miro como un chico afectado se acaricia a sí mismo. A pesar de que estoy en la oscuridad de la cubierta, me sonrojo.
Una voz baja y ronca viene de la izquierda:

-¿Puedes bailar así?- Salto, sorprendida. Me asomo en las sombras y veo a un chico que frecuenta las fiestas de Cheryl, un jugador de fútbol llamado Jordan.

-No- digo, sacudiendo mi cabeza -Definitivamente no.- Se ríe, apoyándose en la barandilla de la cubierta.

-Claro que puedes.- Sus dedos acarician mi hombro y me estremezco -Deberías tratar. Serías caliente. Ella está bien de aspecto, ¿Pero tú? Estás bien como el infierno, chica.- Me sonrojo tanto que mi cara está caliente. Me río nerviosa.

-Estás loco.

-No, no lo estoy. Solo sé lo que me gusta.- Su tono indica que se está refiriendo a mí. Todavía no puedo verlo. Está en las sombras, en la hierba más allá de la cubierta.

The Stripper - Herman Tømmeraas Y Tu.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora