Chanyeol... ya no es el mismo.
Ha estado leyendo. Y ha estado pensando.
Extrañamente sus lecturas son variopintas y viajan desde textos históricos hasta las revistas semanales donde se explayan en plantas y flores. A veces se aburre, pero se da ánimos diciéndose a sí mismo que no quiere parecer un idiota total frente a Baekhyun.
Aunque tampoco es como si fuese a quedar con él.
Más que nada, su mente se queda enfrascada en los millones de letras que Baekhyun ha escrito sobre los cerezos. Y aunque esté exagerando respecto a su cantidad, sí son demasiadas. Lo que es peor, cuando abre el archivo y lo lee, le saben como haber probado unas cuantas nada más.
Sin quererlo se encuentra presionando teclas que muestren su insistencia por más de esas letras.
Mar 18, 9:18 am
Lo terminé de leer hace poco.
Cada vez me impresionas más, Baekhyun. En serio que la dulce primavera fue hecha para ser relatada y descrita por ti porque no hay forma de que sienta algo en el pecho al leer si no lo escribes tú. ¿Es demasiado raro esto? Maldición deberías golpearme. Estoy diciendo cosas extrañas.Hmmmm.
Recarga la mandíbula en una de sus manos, cabeceando mientras hace el intento de que el lápiz bajo su nariz mantenga el equilibrio.
Chanyeol sabe que si Kim Jongdae estuviera leyendo su conversación, le recriminaría qué demonios está haciendo y por qué no saca provecho de la situación, ya que se ha tomado toda la molestia de contestar a todo aquello y seguirle el juego. Sí. El problema es que Jongdae no sabe hasta qué punto está Chanyeol afectado. Ni él mismo sabe hasta qué grado.
¿Tendrá alguna enfermedad crónica repentina de lectura compulsiva-exclusiva con Byun Baekhyun?
Para nada hahahaha, se motiva. Puede que el amor por la lectura se haya inyectado por sus venas al fin. Baekhyun nada tiene que hacer aquí.
—¿Aun así debería ver a un médico?
—¡He, Chanyeol! —saluda Yixing entrando al aula y tomando asiendo junto a él— Oh, pero si estas terrible. ¿No dormiste?
—Uh, yo, en realidad no.
—Deberías dejar en paz los videojuegos, te ponen mal.
Yixing coloca una mano en su hombro, condescendiente. Chanyeol le retira el brazo, ofendido.
—Estuve leyendo ¿sí? Tooooda la noche.
—Oh, ya veo.
—¡Es en serio!
—Por eso, te creo —achina los ojos para descansarlos un rato. Chanyeol piensa que no es tomado en serio y enfurece. A su manera.
—De verdad, Xing. Como tres millones de palabras. No, espera. Tal vez cuatro.
—Eso es demasiado.
—Te lo dije —dice Chanyeol con una enorme sonrisa de suficiencia, saludando con ánimo a la profesora en cuanto llega. Sin embargo no escucha un saludo de parte de Yixing, quien parece perdido todavía, pero a Chanyeol ya no le interesa. Que su amigo crea lo que quiera.
—Uhm.
—¿Uhm qué? —pregunta distraído, atento a la pizarra.
—Creo que, Chanyeol...
—¿Qué sucede?
Chanyeol escarba en su mochila y saca el libro correspondiente a la clase, dándose cuenta de algo.
—Espera —murmura con la mirada clavada al libro, recordando los deberes que tuvo que haber hecho el día de ayer.
¿No era algo sobre leer cuarenta páginas junto a siete artículos?
—¡Ah! —exclama Yixing en un susurro, dando al clavo finalmente— Si pudiste leer tantas palabras entonces pudiste haber terminado el bloque de historia junto a los artículos. Incluso te tuvo que haber dado tiempo para leer más. ¡Bien hecho, Chan! Te has vuelto muy estudioso.
Le palmea el hombro a Chanyeol, contento por él mientras el alto deja caer los hombros y con ellos el libro que no leyó ni una pizca por estar centrado en la lectura de Baekhyun.
¡Bien! Sólo serán dos páginas... Recuerda haber dicho durante la tarde, la luz fresca del día se colaba por las persianas suavemente mientras él estiraba los músculos antes de acomodar la computadora en su regazo. Quince minutos después había terminado de leer el archivo y ya se había hecho de madrugada, según su percepción.
Puede que la obsesión inyectada en sus venas sí sea exclusivamente para algo relativo a ese pequeño escritor. Sólo puede.
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Blossoms day ✽。 chanbaek
FanfictionPark Chanyeol sabe que corregir textos no es precisamente la ocupación más sencilla del mundo, no obstante, no va a negarse a hacerlo cuando recibe un correo electrónico equivocado donde un chico de palabras tan dulces como su persona le solicita ay...