Blossoms day ✽｡ chanbaek

♡ extra 3

¿Grandes o pequeñas?

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Chanyeol sabía que era una mala idea pasar por la clase de tutoría de Jinri, pero Baekhyun había sugerido visitarla después de mucho tiempo de no saber de ella, aprovechando que montarían una exposición sobre la psicología del color en la galería de arte del mismo edificio donde se imparten asesorías.

—¡Baek! —la chica chilla con emoción lanzándose a abrazarlo y apretujarlo, sacando una sonrisa extensa en Baekhyun— Tanto tiempo, ¿dónde has estado?

—Lo sé —se queja Baekhyun con pena—, lo siento. He estado ocupado con la estación de radio y te dejé todo el mando a ti. Lo siento en verdad.

—Yah, deja de disculparte. Todos son como niños de primaria por aquí, no es difícil controlarlos.

Baekhyun sonríe con picardía. —Ah, demasiado mala.

—Pero claro.

Jinri le manda un guiño de astucia, pero la diversión de su cara cae completamente al mirar Chanyeol. Su voz se dirige a él, esta vez sin dulzura. — ¿Y tú qué?

Chanyeol se encoge de hombros como quien no quiere la cosa mientras se mantiene un poco apartado con las manos metidas en los bolsillos. Tal vez si se queda quieto y no hace ningún movimiento, nadie se percatara de que él es un blanco fácil para molestar.

Pero debió haber sabido que especialmente Jinri nunca sería suave con él.

—Déjame adivinar —espeta con la barbilla alzada—. Reprobaste el año y vienes a tomar cursos de nuevo. No es posible, Park. ¿Qué estuviste haciendo durante todas las clases en lugar de prestar atención? ¡Oh, sí! Si no mal recuerdo, mandando notitas a tus compañeros como si estuvieras en el colegio.

Él pasa saliva ante el recuerdo. ¿Qué es lo que había escrito? Con ese niño Taehun o Taeyoung. Hablaban de gustos con respecto a las chicas y...

—Tú —Chanyeol gruñe, sintiendo entrar en pánico porque algo en la sonrisa de Jinri le hace ver que ella sabe lo de esas notas— Y-Yo no volví por eso. Estoy por titularme, para tu información.

La chica suelta una risa. Sus ojos afilados se divierten con Chanyeol y su pánico.

—Si eres el mismo chico que enviaba esas notas de hace unos meses y que está por titularse, en serio siento pena por la situación de nuestra universidad.

—Yo...

—Jinri, deja de molestarlo —Baekhyun reprende con suavidad, como si le dijera a una niña pequeña y berrinchuda que no puede sentarse en el asiento del piloto para conducir. Acto seguido, ella cierra la boca.

—Pero, Baek~. Después ya no lo voy a ver, déjame hacerlo sufrir aunque sea tantito.

Chanyeol se quiere ahogar por esos cambios de actitud, entre molesto por el trato recibido y aliviado de que lo haya dejado en paz. Pero tan pronto como esa cálida aura aparece en la tutora, desaparece nuevamente cuando vuelve a dirigirse a él.

—Pero es cierto lo que digo ¿no es así?

—No sé de qué hablas —murmura entre dientes.

—¡Vamos, Park! ¡Dile lo de las tetas! Dile de lo que un alumno de último grado de la gran y prestigiosa escuela de artes habla en medio de sus clases —anima en voz alta y Chanyeol siente su rostro enrojecer furiosamente. Mierda-mierda-mierda-mierda. Esa vez Baekhyun debió haber escondido la nota en el cajón de la mesa para evitar que Jinri la leyera para toda la clase y lo pusiera en ridículo, pero entonces ¿cómo? Jinri debió haberse escabullido para encontrarla o simplemente la encontró por casualidad. ¿¡Cómo es que lo recuerda!? ¿¡Solo por el simple gozo de molestarlo!?— ¿Qué esperas? ¡Lo de las tetas!

Como si fuera un grito que le declara la guerra, Jinri no deja de sonreír traviesamente.

—¿Qué? —Baekhyun voltea en dirección a ambas personas, confundido— ¿De qué habla, Chan?

Chanyeol balbucea nada comprensible y destroza a Jinri con la mirada, sin poder cerrarle la boca cuando se hace la desentendida con el bajito.

—Oh, solo hablamos de gustos, Baek. Chanyeol dijo que le gustaban grandes si no me equivoco, pero creo que quiso referirse a otros atributos.

Con una sonrisa maliciosa se cruza de brazos mientras vocaliza sin hacer ruido: «penes», de modo que solamente Chanyeol pueda leerle los labios. Desatento, Baekhyun parpadea inocentemente y jala la manga de su novio, quien se rehúsa a mirarlo mientras enrojece.

—¿Grandes?

Jinri recita antes de que Chanyeol haga un movimiento:

—Oh sí, los más enormes.

—¿A qué se refieren? —Baekhyun pide, su delgada voz saliendo casi como un berrinche— ¿Chan?

Es ese tono melodioso y ese diminutivo lo que hace a Chanyeol ceder, con un corazón acelerado.

—¿Sí, pequeño?

—¿Qué es eso de los más enormes?

—Son mis gustos...

—Te gustan los más enormes ¿qué? —ladea la cabeza, perplejo como un pajarito sin malicia.

—Me refería a... la altura de una persona, por supuesto —Chanyeol traga saliva evitando mirarlo a los ojos— Con grandes quería decir altos. Las personas altas, ¡sí, eso!

—Ya veo. Así que grandes... —Baekhyun se aplaca con solemnidad en el suelo y Chanyeol cae en cuenta de su error demasiado tarde.

Triunfando como siempre, Park Chanyeol.

—¡No! Es decir —busca una rápida excusa. Puede oír la risa atropellada de Jinri a sus espaldas, esa maldita—, eso fue hace mucho. En realidad me gustan... pequeños.

Santo cielo. Nunca va a olvidar la cara de Jinri partiéndose de la risa en silencio porque no hablaban de estaturas sino de penes. Pero al menos se contentó con los ojitos brillosos de Baekhyun por saber que entraba en los gustos de Chanyeol de la forma más inocente posible, siendo una imagen que no se cansaría nunca de contemplar.

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