Pienso a diario en mis sentimientos, en cómo el mundo me trata, en que espero de la gente.
Pienso en el cambio que he dado, en cómo la noche cada vez me parece más lejana que el día; en la pérdida de mis capacidades.
Y eso me hace cuestionarme una cosa: ¿Sigo queriendo como antes? ¿Soy más fuerte? ¿Más débil? Ojalá encontrar las respuestas al final del cigarro, en el culo de la botella de cerveza de cada viernes por la noche, de los besos vacíos de los sábados, de las noches de insomnio... ojalá tener la respuesta a un millón de preguntas, que poco a poco, se vuelven distantes y borrosas.
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Cartas de una moribunda
PoetryEl amor es una fría batalla a muerte. Nuestro deber es huir de él, pero es gracioso que, cuando esté nos alcanza, nos volvamos unos masoquistas que queremos más. Iré subiendo lo más profundo de mis sentimientos... es hora de abrir un poco el corazón.