Tengo tanto para decirte, tanto de que hablar... y sin embargo en dos minutos se me forma un nudo en la garganta.
Te echo de menos.
Me duele el corazón de una forma que me asfixia. Quiero verte, quiero oírte. Quiero volver a pasar horas hablando de cualquier cosa, No minutos más contadosMe duele, joder. Me duele echarte de menos de esa forma... y sin embargo, tampoco puedo decir nada, pues no es culpa tuya, no es culpa de nadie.
Aún así me atraganto con mis propios sentimientos... te suplico que me los arranques del pecho, o que me arranques a mi contigo. Porque no puedo respirar de esta manera.Y por eso, ahora, con más motivo, mi estación favorita es el invierno. Pues no habrá nadie, y podremos vernos. Porque, no sabes cómo deseo que pase el tiempo, para poder estar contigo, para que no me duela tanto el pecho.
ESTÁS LEYENDO
Cartas de una moribunda
PoetryEl amor es una fría batalla a muerte. Nuestro deber es huir de él, pero es gracioso que, cuando esté nos alcanza, nos volvamos unos masoquistas que queremos más. Iré subiendo lo más profundo de mis sentimientos... es hora de abrir un poco el corazón.