Tras dos meses de aquella romántica y trágica primera "cita", me encuentro intentando re-evocar los recuerdos. Quiero recordar cómo era sentir tus labios contra los míos, el olor exacto de tu perfume, la sensación de sentirme abrazada por ti.
Quiero recordarlos... pero no puedo. Todo han pasado a imágenes sin las texturas que busco.
Y, personalmente, soy una muerta de hambre que ve una foto de una deliciosa comida mientras mastica algo que engañe a su estómago.
Por ello estoy contando los días para que pase agosto. Para olvidarme de todo y saber si te voy a ver, cuando podré volverte a abrazar, a sabotearte, a acurrucarme... de mientras, tendré que ser el fantasma de la ópera, tan famoso y deprimente. Estaré ahí, pero no me verás.
Te esperaré, pero por el momento seré un mero espíritu. Hasta pronto, amor.
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Cartas de una moribunda
PoesiaEl amor es una fría batalla a muerte. Nuestro deber es huir de él, pero es gracioso que, cuando esté nos alcanza, nos volvamos unos masoquistas que queremos más. Iré subiendo lo más profundo de mis sentimientos... es hora de abrir un poco el corazón.
