Cartas de una moribunda

Mi venus

(Recomendación: escuchar primero la canción de Día sexto "no sé cómo decirte". Por que lo escribí con el mismo ritmo en mi cabeza. Una idiotez, lo sé. Buenas noches a todxs, o buenos días)

Joder. Nunca he conocido a nadie que logrará decirme sin hacerlo, sin mostrarme como se siente con un par de versos. Desmontando canciones, arreglando corazones, creando vórtices temporales, logrando que el tiempo fluya y creé nuevos acordes.
Nunca he conocido a nadie que llegara a ver dentro de mi cordura, cuando solo se aprecia mi honda locura; nadie que crea en mi lo suficiente, para darse cuenta de que en verdad soy elocuente.
Hasta que apareciste de la nada, y todo se derrumbó con una videollamada. Y daba igual cuanto lo intentará, si es que en mi corazón quedaste atada, atada con tus alas de Libertad, como un Lobo que aúlla sin miedo al que dirán. Creaste nuevas experiencias, nuevos sentimientos de donde no había nada.
Ni engañándome pude escapar de tu red, de la que ahora que no me rescaten ni me saquen, pues he encontrado un cómodo lugar en el hueco de tu cuello, donde me gustaría pasar cada invierno.
Verte, saber que existes, que no eres invisible, un producto de la imaginación, fue algo mágico, incomprensible. Besar tus labios, y darme cuenta de que habían estado en el lugar equivocado tanto rato, perdidos en la marea, cuando su sitio era en medio campo.

Y como cada noche, ahora pienso en ti, en tus curvas, tu mirada, aquellas en las que me perdía sin pizca de amargura, comprendiendo,  que daba igual cuanto hubiera buscado, porque unos ojos chocolate ya me habían robado.
Creía que me conocía lo suficiente, pero parece que tú descubriste una nueva especie en mi subconsciente, creando una mejor versión de mi, a la que explorar y descubrir.
Da igual cuanto diga que te quiero, cuando se que aún no comprendo dónde está mi límite de mis sentimientos, ¿estarán en la luna o en el siguiente universo?
Quiero observarlo.
¿Porque no bajas, diosa de mis sentidos, y vamos a comprobarlo?