Blondies Don't Cry [Ambilia]

17. Ajuste

"Eso es muy complicado" Delfina frunció el ceño "¿Hallar la manera de exponer a Luna y a Emilia no?"

"Sí, Delfina" afirmó Ámbar "Sería la fase final, Lunita saldrá de mi vida, se sentirá tan avergonzada que no volverá al Roller y como buena amiga" hizo comillas con sus dedos "Le pediré a mi tía que la cambie de escuela"

"Ámbar, creo que estás llevando esto muy lejos..."

"¡Ella se metió con Emilia, Delfina! ¡Se metió con ella cuando claramente decía «No tocar»!" gritó en susurros ya que estaban en el Jam & Roller y no podían oírlas

"Bien, entiendo, pero prométeme que después no más planes para destrozar a alguien" Ámbar asintió

"Podés confíar en mí" sonrió y se levantó "Iré a practicar con el equipo, cuando salga, veremos que hacer" Delfina asintió y se dirigió a los lockers

Pero ahí se encontró a Simón justo en la entrada, iba a esquivarlo pero él se volvió a atravesar.

"¿Qué querés?" preguntó molesta

"Lo siento, Ámbar, no puedes entrar" Ámbar entrecerró los ojos intentando descifrar porqué se le notaba tan nervioso

"¿Y por qué no?" cruzó los brazos mirándolo atenta y Simón rascó su nuca, demasiado nervioso

"Eh... No lo sé, Juliana entró y me pidió que no dejara a nadie pasar"

"Yo no recibo órdenes, menos de vos" intentó entrar pero Simón se lo impido nuevamente

"Sé que estás molesta conmigo, y quiero pedirte perdón por todo lo que te dije" Ámbar arqueó la ceja "Ése no era yo, estaba muy molesto" la rubia rió irónicamente

"Si no querés que entre buscá otro tema menos tonto para tocar, te conozco, sé cuando mientes, Simón" se dio media vuelta y fue a una de las mesas a esperar

Mientras Simón afligido veía como Ámbar se alejaba, increíble que no le haya creído cuando lo había dicho de corazón, pero estaba tan concentrado en su ex novia que no notó cuando Emilia entró a los lockers.

"¿Qué haces con los patines de Jim?" preguntó una vez que levantó la vista de su celular

Matteo la miró rápidamente y sonrió "No tengo porqué darte explicaciones"

Emilia observó que tenía una llave en su mano y supuso que estaba haciendo "Yo creo que sí, si no fuera porque eres el santo Matteo diría que estás ajustando las ruedas de su patín" el italiano rodó los ojos

"Bien, sí, estoy ajustando sus ruedas" respondió viéndose sin ninguna escapatoria

"¿Por qué, Matteo? ¿Qué te ha hecho Jim?" lo miró molesta y le quitó los patines

"No, no, no, estás entendiendo mal todo, Jim me pidió que ajustara sus ruedas porque estaban algo flojas" Emilia frunció el ceño

"No te creo nada" Matteo rió cínicamente

"No me creas, princesa" se encogió de hombros "Es la verdad" Emilia lo miró con desconfianza "Pero si le entregas los patines así a Jim podría caerse y sufrir una muy grave lesión" pasó por su lado dispuesto a salir pero Emilia lo detuvo tomándolo del brazo

"Bien, toma, no quiero que nada malo le pase a Jim" le entregó los patines y Matteo los tomó con una falsa sonrisa

"No le pasará nada" Emilia asintió y fue a su locker para sacar sus patines

Y mientras Emilia salía, Simón entró. "¿Que parte de no debes pasar a nadie no comprendes?" preguntó Matteo molesto

"Te juro que no ví cuando entró" se apresuró a decir