Parientes

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Hellen quita todo lo que hay en la mesa con pasar la mano botando velas y vasos de cristal al suelo sin pensarlo, sujeto con fuerza la camisa de Jackson.

-Solo aguanta.-me susurra él.

-Pon la aquí.-le indica ella. Jackson me coloca encima de la mesa y Hellen me pone una almohada bajo la cabeza. -Necesito que la sostengáis con fuerza si se mueve la bala irá mas adentro y sera imposible sacarla.

Jackson asiente y me sonríe, pero no es una sonrisa burlona es una sonrisa tranquilizadora.

-Iré por unas pinzas.-le dice Hellen. Escucho sus pasos ir por toda la casa.

-¿Nunca te habían disparado? -niego.-Ya veo, él te cuido bien...supongo.-No le respondo.-Estarás bien, tu nana es Vigilante por lo que veo.

-Si.-responde ella.-ahora deja de hablar.-Jackson no responde.-sujeta sus dos manos.-El se coloca a mi lado y las sujeta. Puedo ver en sus ojos azules el arrepentimiento.-Vas a estar bien.-me susurra Hellen. -no sueltes sus manos por nada del mundo. -siento como algo me talla los muslos.-Es una faja, así sera mas fácil.

-Bien.-mi pecho sube y baja rápido. Hellen corta una parte de mi pantalón y tomo aire.

Algo frió toca mi piel y mis piernas se quieren mover pero la faja lo evita intento zafar me de las manos de Jackson, el aplica mas fuerza y cierro los ojos con fuerza.

-Un poco mas Sophie.-me alienta Hellen.-ya casi, sostén sus manos.-le dice a Jackson. Las pinzas se insertan mas y las lágrimas amenazan con salir, no lo puedo evitar y suelto un grito de dolor.

Abro los ojos y Jackson me mira preocupado. En sus ojos se refleja un Lo siento.

Logro gesticular "Esta bien"

El niega lentamente y coloca su frente contra la mía cerrando los ojos. Las pinzas salen de mi pierna, el dolor nos es tanto pero aún así duele.

-Ya esta afuera, te voy a coser.-Jackson se reincorpora sin soltar mis muñecas. Hellen aparece en mi campo de visión, su cabello gris plateado brilla contra la luz del comedor, sus ojos verdes me miran con cariño. Hay una pequeña sonrisa de preocupación en su boca. Ella pasa su mano por mi mejilla y limpia la sangre que había en ella.-Aguanta mas.-Y con eso desaparece de mi vista.

Jackson evita mi mirada, se siente culpable. Se que el manejo sobre el sujeto era un juego, porque si en realidad quisiera matarme lo habría hecho el día en que le devolví sus acciones.

-No es...

-Calla.-no termino de hablar. -si lo es, ahora calla.

Escucho los pasos de Hellen.-Esto no va a doler tanto.-siento un pequeño punzón en la pierna, la aguja esta caliente. Cierro la boca con fuerza y entierro las uñas en la mesa.

-Ya esta.-termina de coser Hellen y corta el hilo.-Ahora tendrás que reposar, el íncubo podrá llevarte al cuarto. Hablaré contigo mañana.-Jackson me alza con cuidado y miro a Hellen.

-Gracias Nana.-ella asiente y sonríe.

Mis ojos comienzan a pesar y todo se vuelve negro.

Abro los ojos y lo primero que veo son los tontos rayos de sol en mi cara. Paso mi mano frente a ellos y la vista se aclara. Estoy en un cuarto, Nana. Miro inmediatamente mi pierna, esta vendada.

-Hasta que despiertas Sophie.-miro a mi izquierda y veo a Jackson. No le respondo. -Yo...

-No empieces. -lo callo y el me mira sorprendido.-No quiero disculpas, ahora si quieres que te perdone o lo que sea lleva me abajo. Necesito hablar con ella.

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