Un Amor por Celular

Capítulo 4: El otro

-Aquí tienes papá-le di la paga y aplaudió. Era nuestro primer cliente que utilizaba el delivery.

-No te quites el casco-me mostró un papel con otra dirección- este es el último. Luego cerramos,así mañana comenzamos temprano.

-Vale- cogí el papel y me dirigí a la dirección. Era en frente del edificio anterior. Era una casa enorme, se notaba que el que vivía allí tenía dinero. Toqué el timbre y un muchacho joven me abrió. Era alto, delgado, pelo castaño claro y ojos color miel. Tenía un enorme aro en la nariz y un tatuaje en el cuello.

-Pero si es el delivery-dijo asombrado- y mira que bonito cabello tienes- otro más que halagaba mi cabello. Solamente era violeta, tampoco tenía un cuerno de rinoceronte-¿Cuánto es?

-Son $60-le contesté.

-Toma. Quédate con el cambio-me dijo.

-Pero son $100.

-Tómalo como tu propina. Por tu pelo y porque eres una linda chica- ¿Por qué todos me veían bonita hoy?.

Le agradecí, pero no me moví del lugar. Me había quedado hipnotizada viendo su tatuaje.

-¿Te gusta?-me preguntó.En su cuello tenía tatuado lo que aparentaba ser su nombre.Skip.

-Si. Yo quería hacerme uno. Pero ya sabes...me da miedo.

-No debes de tenerlo. Yo puedo hacerte uno. Ahora ya sabes donde vivo-me guiñó el ojo.

-Vale, gracias-me despedí y me subí a la moto.

-¡Espera!-me gritó-¡No me has dicho tu nombre!

-¡Lola!-lo saludé con la mano y aceleré.

Cuando llegué a la pizzería, mi padre y Stacey me preguntaron porque me había demorado tanto.

-Nada. Solo había mucho tráfico-cambié rápido de tema-miren, mi primera propina.

-Genial amiga- me felicitó Stacey.

Guardamos el dinero, hicimos la cuenta de lo del día y cerramos. Ya era tarde y estaba agotada. No era normal en mi vida que dos chicos se me insinúen en un día. Yo nunca había tenido tanta suerte. Por lo tanto yo me encontraba super feliz.

Fui a mi apartamento, saludé a Fido y encendí el televisor.

-Al fin un poco de descanso-me senté en el sofá y me quedé dormida.