-¿Y ese quién era?- preguntó Stacey desconcertada.
-Skip.
-Un momento. El chico que venía contigo también se llama Skip.
-Si, al igual que el del número de teléfono- Stacey no entendía nada. Se quedó pensando unos minutos.
-¿Sabes sus apellidos?-preguntó.
-El que vino conmigo es Skip Mcalister y el otro creo que es Skip Buffer.
-Vale, y vas a ir a su fiesta,¿no es así?.
-No lo sé. Tal vez.
-Es una buena oportunidad amiga, pero creo que deberías elegir a un solo Skip. Porque luego esto va a ser un desastre- me dijo- iré contigo, así conozco mas a este Skip y quien sabe, a lo mejor conozco a un lindo chico.
-Vale-reí- si tu quieres.
-Invita al otro Skip- me dijo.
-¿Para qué?.
-De ese modo conoceremos bien a ambos- su idea no era tan mala. Acepté y me dirigí al departamento de Skip. Cuando le propuse lo de la fiesta, no se negó.
-Suena divertido, pero no conozco a nadie- me dijo.
-Yo tampoco, pero estarás conmigo y con mi amiga Stacey. Es mejor que ir solo,¿no lo crees?.
-Mmm... no se.... soportarte a ti- lo golpeé y reímos. Le dí la dirección de mi casa, y quedamos en que me pasaría a buscar a las 20:00.
Cuando volví a la pizzería, Stacey y yo atendimos a un par de clientes. Seguían siendo los mismos de antes, pero con el delivery por lo menos teníamos algunos mas.
Cerramos temprano y nos fuimos al centro para ir a comprar ropa. La mansión de Skip era muy lujosa para que fueramos con un vestido barato. Intentamos buscar algo lindo, que no sea extremadamente elegante, pero que fuera llamativo.
Entramos en un local que había en el fondo de una galería. Era un lugar muy escondido al que nunca habíamos visto, donde los precios eran muy accesibles. Stacey se compró un vestido largo hasta las rodillas, color azul, suelto y su escote era en forma de corazón. Mi vestido era negro, muy corto, casi que se me veía todo y el escote era enforma de corazón y tenía un pequeño encaje blanco.
Salimos felices del lugar y fuimos a mi departamento. Le presté un par de zapatos a Stacey, rojos taco aguja y los mios negros taco aguja. Nos recojimos el cabello con un cinta y nos pusimos perfume. Ambas estabamos divinas. Esperamos media hora aproximadamente cuando llegó Skip.
-¿Cómo están las bellas señoritas?-preguntó. Llevaba una camisa color rosa, un pantalón al cuerpo color negro y zapatillas blancas.
-Hola Skip- se acercó hacia mi y me dió un beso en la mejilla super dulce. A Stacey la saludó con la mano- estás muy lindo.
-¿Yo?.No. Estoy simple. Ustedes están muy bonitas- sonreímos y nos fuimos, ya que se nos hacía tarde.
Cuando llegamos a la mansión, la puerta estaba abierta y la música estaba a tope.
-¡Lola!- Skip se acercaba a recibirnos-¿Quiénes son tus amigos?.
-Ella es Stacey y el es Skip.
-¿Skip?.Veo que ambos tenemos un nombre genial-le pegó en la espalda. A Stacey le besó la mano-una bella señorita.
-Gracias-Stacey parecía una niña de secundaria, cuando conoce a su ídolo.
-Siéntanse como en su casa- dijo y tomó a Skip de la mano. No los vi mas por un largo rato.
*Skip Mcalister*
-Oye amigo. ¿Quién eres tu?- me preguntó Skip.
-Me llamo..
-No, no quiero saber como te llamas-dijo burlón- quiero saber si eres algo de Lola.
-No. Solo soy su amigo-respondí.
-Menos mal tio, porque en verdad me gusta. Y tengo ganas de salir con ella.
-Oh...que bien- no podía ser cierto. Yo quería a Lola mas que a nada en el mundo, y el poco tiempo que había estado con ella, me había enamorado. Si, enamorado. Era muy especial para mi.
-Pero, tu no sabes mucho de ella. ¿Sabes si tiene novio?.
-No, creo que no- quería irme de allí.
-¿Sabes una cosa?.Prefiero que estés un poco alejado de ella. Ya sabes, no quiero que la confundas, las mujeres son así. Creen que eres el amor de su vida, cuando tu solamente quieres su amistad- decía. Estaba algo borracho.
-¿No es al reves?.
¡Claro que no tio!- gritó cabreado- pero es que tu no entiendes nada. ¿Has tenido novia alguna vez?.
-Si.
-Si no sigues con ella por algo es ¿no?. Solo has lo que te digo.
-No voy a dejar de hablar con Lola porque tu me lo digas.
-No me hagas cabrear querido Skip. Aléjate de Lola, se que tu no quieres solamente su amistad. Vi cuando la acompañaste a la pizzería y vi ese beso en su mejilla. No fue un beso de amistad.
-Vale, no te metas. Tu no eres quien para darme órdenes.
-¿Me desafías?.Vete de mi casa ahora. Pero a las chicas las dejas. Mis amigos y yo nos divertiremos mucho con ellas-lo golpeé fuertemente en la cara y me fui. No quería armar mas problemas. Salí y crucé la calle, ya que mi departamento quedaba enfrente.
-¡Skip!- Lola corría detrás mio -¿qué es lo que acaba de suceder allí adentro?.¿Por qué lo has golpeado?.
-Lola tu no entiendes. Déjame solo. Ya te he avergonzado bastante.
-Tu no me has avergonzado,¿de qué hablas?¿Qué te ha dicho Skip para que te enojaras así?.
-Nada, me hizo un montón de preguntas sobre ti, si tenías novio, si yo era algo tuyo, dijo que se enfiestaría contigo y con tu amiga- Lola abrió los ojos. Estaba totalmente sorprendida y decepcionada.
-Lamento todo esto-dijo- no debía haberte traído aquí.
-Tu no tienes la culpa-una sonrisa se dibujó en su rostro-¿de que te ríes?.
-¿Lo has golpeado por mi?-preguntó.
-Si-respondí tímidamete. En ese mismo instante se colgó de mi cuello y me abrazó. Luego me dió un beso en la mejilla. No sabía que decir después de eso. Se quedó mirando avergonzada.
-Lo siento,yo...- no la dejé hablar. La besé. Ella me correspondió el beso y me rodeó con sus brazos. La tomé por la cintura y la llevé contra la pared. Nos detuvimos y nos miramos a los ojos. Ella nuevamente me besó, tenía el control de todo.
La tomé por las piernas y la alcé. Nunca paramos de besarnos. Saqué las llaves de mi bolsillo y abrí la puerta de calle. De la misma manera subimos por el ascensor y entramos a mi departamento.
Todo era tan real, tan perfecto. Fuimos a mi habitación y la apoyé en mi cama.
-Solo hazlo-me dijo al oído. Asentí y luego sucedió lo que ambos buscábamos. Lola era mia.
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Un Amor por Celular
General FictionLola es una joven de 20 años, trabaja en una pizzería como repartidora,donde conoce a una mujer llamada Becca. Ella le pasa el número de un desconocido al que comienza a hablarle, pero sin saber ni quien, ni como es. ¿Logrará conocer al hombre que l...