21.

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Milo se acerca a su hermano que observa con atención el lugar, el sitio parecía no estar habitado, pero ambos hermanos sabían que no era así, perfectamente escondidos los hombres de Iván esperaban el momento propicio para disparar, Naím le hace señas a Mateo para que sus hombres se movilicen, estos empiezan a dispersarse por el lugar.

-Cuídate quieres- le dice a su hermano mirando hacia unos peldaños que conducían hacía la parte  de arriba.

-Lo haré hermanito, esto termina hoy- alista su arma- uno de los dos morirá.

Milo asiente, corre hasta los peldaños y da un salto limpio hasta alcanzar las barras, se trepa hasta arriba y continua trepándose por el resto con gran agilidad, el chico prácticamente era un hombre mono, Naím sonríe y avanza hacia adentro del lugar.


Clara

Lucho por desatarme, pero los precinto están bien ajustados, es imposible, en una de las pantallas se ve a Naím, pero no esta solo, uno de los hombres de Iván se acerca a él con sigilo esta armado y listo para disparar, cada vez esta más cerca de él.

<<Por favor, ten cuidado>>

Naím toma de la muñeca al sujeto evitando que dispare su arma, y le propina varios golpes al  torso que lo dejan inconsciente, puedo escuchar los disparos que vienen de afuera, los hombres de Naím por un lado, Milo peleando de dos a tres hombres, Iván camina por las pasarelas de arriba.

La puerta de la habitación donde estoy se abre de golpe, no veo quién es, trato de pelear.

-Shhh calma niña- la voz la reconozco es aquel hombre del otro día.

Me quita la cinta de la boca.

-¿Vas a llevarme con tu jefe para matarme?- vocifero.

-¿Eso piensas?- más disparos y una pelea entre en Naím con dos tipos a los que arrojo desde una de las pasarelas al suelo- tu novio si que tiene el diploma de peleas- dice Hugo moviendo la cabeza- vamos- me libera las muñecas- escúchame niña- le presto atención- soy policía anti narcóticos, estoy encubierto si.

No lo podía creer , ya se me hacía extraño que se comportara conmigo de una manera decente.

-Ahora lo que harás será salir por esa puerta- señala la puerta- y carreras por el pasillo hasta doblar a la derecha, te llevara a la salida, corre y no te detengas, no te quedes aquí, de un momento a otro mi equipo entrara, vete.

Hago lo que me dice, corro y agradezco al hombre por liberarme, aun me duele al costado de mi cuerpo pero no hago caso, escucho disparos y pienso en Naím, me detengo en mitad del pasillo.

-No puedo hacerlo- digo en voz alta.


Naím

Me deshago enseguida de los hombres, sigo avanzando hacía abajo y un disparo proveniente de arriba da de lleno contra la columna, por poco y me da a mi, no logro ver al tirador, pero si a mi hermano que se trepa llegando arriba.

-Bastardo habilidoso- expreso.

Segundos después escucho un forcejeo, el tirador cae desde la parte de arriba y queda tendido sobre la pasarela delante de mis pies, mi hermano asoma por la barandilla y se ríe.

-¡Gracias!- le digo y sigo por el camino mientras que él me hace señas de que rodeara el lugar.

-Hola viejo amigo.

Iván me da una patada directa al esternón.

-Hijo de perra- escupo sangre, esto no es bueno.

Se ríe.

Los príncipes de la mafia II  : NaímDonde viven las historias. Descúbrelo ahora