Caminar en la lluvia (YeWook)

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Cuando comencé a sentirme mejor, HyukJae apareció en la habitación con una maleta llena de cosas supuestamente mías, me obligo a quitarme el vestido y me obligó a ponerme ropa nueva, convenciéndome de cierta forma diciéndome que si me comportaba y no salía corriendo como antes que me llevaría con RyeoWook.

Una gran parte de mi se negaba a creerle pero era a la única esperanza a la que podía aferrarme mientras tanto.

Si las cosas no eran como había prometido encontraría la forma de escapar.

Mientras me vestía HyukJae me hizo preguntas sobre lo que pudiese recordar sobre RyeoWook, su edad, si sabía dónde vivía, como lucía, etc, etc. Yo respondí a todo, claro, evitando mencionar la parte en "como" nos habíamos conocido o el hecho de que yo antes era un gato, así también no especifiqué "El por qué" debía de ir por él, ni mucho menos mencione nada relacionado con todo su sufrimiento.

- Está bien YeSung.- Dijo el chico cerciorándose de que estuviese listo.- encontraré a RyeoWook por tí, pero debes prometerme que no trataras mal a Hae.

Lo miré un tanto desconsternado con sus palabras, no comprendía a lo que se refería con "tratarlo mal". Hasta dónde yo sabía no lo había golpeado, ni gritado, ni le había insultado.

Pero asentí de todas formas, me había convencido con lo de RyeoWook.

Después de esa pequeña conversación con HyukJae nos dirigimos a la salida de lo que ahora sabía con seguridad era un hospital, DongHae nos esperaba en el auto y cuando nos vio caminar hacía el sonrió un poco más entusiasmado.

- Andando.- Dijo.

*
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+

El sonido de la lluvia se escuchaba potentemente en mis oídos, a mi al rededor solo veía oscuridad, entonces, entre pasos temblorosos caminé en la nada, sintiendo frío y una extraña necesidad de correr hacía algún lugar. Pasé saliva cuando me embargó la confusión. Mis manos temblaron y más tarde lo hizo mi pecho.

"La ventana está abierta"

- No tiene importancia. ¿En dónde estás?

"Debes irte"

- No

Al final del caminó divisé una luz y con ella un rostro bañado en lagrimas.

Mi corazón se encogió y la soledad se abrió paso en mis entrañas, el recuerdo vivo del miedo y también el del dolor de la esperanza aplastada por puños de hierro.

"No sirvo para nada. Debí morir"

- RyeoWook.- Lo llamé entonces, y él me vio.

Y yo sonreí, y entonces me di cuenta.

"¿Quién eres tú?"

- Okay, según SiWon el pueblo en dónde vive RyeoWook debe de ser por aquí.- Escuché a lo lejos abriendo los ojos de golpe. Miré mis manos y después por la ventana con el pecho agitado y un nudo en la garganta.