Secrets [VK]

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Así que seguí caminando hasta llegar a mi humilde morada, donde...

-¡Jungkook! ¿Has visto la hora qué es? ¡Las malditas doce de la noche! ¿Quién te crees que ere... Ay pero mira nada más, que guapo, venga presentámelo, dime quien es, ya era hora mijo, faltaba un novio, que estás más solo que la una, menos mal porque ya creía que ibas a morir vir-

-¡Shhhh! Está durmiendo, calla mamá...- Susurré. -Por cierto... ¿Qué has dicho?- Pregunté fuera de mis casillas, ¿que iba a morir virgen? Pero esta mujer... ¿Qué le pasa?

-No, nada... Por cierto, estoy con Paula en mi habitación viendo vídeos de core... Eh... Jugando a las cartas... Y bueno... Tu "amigo" ¿Se va a quedar aquí?- A sentí confundido.

-¿Dónde?- Preguntó pícaramente.

-Pues en el colchón inflable...- Mi madre negó con sus manos.

-¡No, no, no, no! Es que se pinchó, y se rompió, y se fue a la verga el colchón, ya ves... A tu cama, los dos bien juntitos, así se refugian del frío, se dan calor... Ya sabes así bien bonito todo... Con cuidado ¿eh? Porque nada más, no me hagas estar cuidandote mañana todo el día, van despac-

-¡Mamá! ¡Relájate, por favor! Se va a despertar y va a asustarse con tus locuras... Él se queda en mi cama y yo me duermo en el sillón, para que esté cómodo.- Intenté seguir caminando, pero la vieja loca se paró en medio.

-Ay mira no, cosa que no presto yo es mi cama, tú cama es tuya, tú duermes en la cama y él también.- Negué con mi cabeza.

-Mira, te me dejas de cuentos, que saco la chancla para que tú veas como aceptas a tu amiguito en la cama.- Se comenzó a quitar el zapato.

-¡No, no, ya, lo siento mami! ¡Se queda en mi cama, conmigo!- Sonrió.

-Así me gusta mi hijito, muy bien, obediente y bien gay, te amo, buenas. noches.- Besó mi mejilla y rodé los ojos.
Se fue saltando por el pasillo cantando su canción favorita.

-¡Boultaurone! ¡Firee!- Golpeé mi cara, la amaba con todo mi corazón, pero me volvía loco.

-¡Mamá, lo vas a despertar! ¡Shhh!- Ni puto caso.

-¡Jungkook! ¿Mierda, está ahí?- Oí pasos.

-¡Paula quédate aquí, está con el novio, estábamos esperando este momento, no lo arruines, por favor!-

Sonó un portazo y risitas.

Suspiré cansado.

Mi madre parecía menor que yo... Y no hablar de mi tía Paula...

Sentí como tocaban mi mejilla, interrumpiendo mi plan de asesinar a mi familia.

Giré mi cabeza para ver a Tae pulsando mi mejilla con su dedo, concentrando en el hoyito que se formaba.

-Genial... Estabas despierto... Woah... ¡Espera! ¿Escuchaste todo eso?- Negó con su cabeza.

Suspiré aliviado.

Por la Santa Ramona, creía que me habían pillado.

Subí a mi habitación y acosté a Tae en mi cama.

-Te vas a quedar aquí ¿bien? No sabía si tus padres se iban a enfadar al verte así... Así que opté por traerte, mañana llamas a tu madre y dices que... Yo que sé, te quedaste haciendo un trabajo o algo...- Asintió durante todo el rato que hablé.

-Bien pues... Duerme...- Miró su cuerpo y luego me miró a mí.

Mierda.

-Oh, ya... Te hace falta pijama... Bien... Usa esto...- Saqué una camisa y unos pantalones que tenía de pijama, no eran ni viejos ni nuevos, pero eran cómodos.