Sugar Babie's (Yoonmin)

¡Protección!

Desperté sintiendome como si mi cuerpo hubiera sido arrollado por un auto (otra vez), mis piernas temblaban y no se diga del dolor de boca y  cabeza que tenía. caminé hasta el baño y  me mire al espejo, mi frente tenía un parche azul con dibujos pequeños de patos, mientras que mi labio estaba abierto.  Bufé y después de lavarme salí a comer algo, en la cocina las tres personas sentadas en el comedor me miraron con la preocupación impregnada en sus rostros.

-¿Cómo te sientes Jiminie?

Me senté al lado de Yoongi -Bien, auque estoy algo cansado y hambriento.

Taehyung puso un plato frente a mi el cual devore al instante, Jungkook me miraba seriamente mientras Taehyung lo hacía con preocupación y cariño maternal.

-¿Ocurre algo? -dije cansado de las miradas

Taehyung se aclaró la garganta -Es sobre tu madre, ella está muy grave tal parece que tiene leucemia, es avanzada y puede que le quede muy poco de vida, además debido a su demencia por las drogas no es posible cuidarla como se debe, los doctores no dan un buen pronóstico

-¿Qué me sugieres?-Pregunte cansado

-Quieren que algún familiar la cuide, tu tía viajó desde China para hacerlo pero quiere que la veas antes de que....sea tarde

-Sólo es si tu lo quieres así- se adelantó a comentar Yoongi- No estas obligado a hacerlo

Guarde silencio, suspirando me levanté y sonreí falsamente.

-Iré en la tarde

-Pero Jimin debes descansar

-Mientras más rápido sea mejor TaeTae, no te preocupes estaré bien

Camine hasta mi habitación siendo seguido por Yoongi.

-¿Puedo acompañarte?

Lo mire asombrado -¿Harías eso por mi?

El asintió y yo lo abrace fuertemente

-Te protegeré Jimin realmente lo haré lo prometo

Me dijo que no iría a trabajar así que nos vestimos para ir al hospital, se preguntarán como salí con la cara tan golpeada pero no hay nada que un caro maquillaje no haga. 

Antes de salir del departamento Taehyung me dio un pequeño caramelo, ese niño era muy dulce, subimos al auto en completo silencio, no es como si tuviera muchas ganas de hablar en estos momentos, no, en lo único que podía pensar era en que vería a la mujer que arruinó mi vida. 

Llegamos al modesto y pequeño hospital, entramos y de inmediato busqué con la mirada a mi adorada tía, esa mujer fue la que me salvo de la terrible vida que llevaba después de enterarse de lo que mi madre hizo, cuidó de mi y me dio la oportunidad de estudiar, pero lo abandone después de un tiempo. En cuanto la vi corrí hacía ella y la abrace fuertemente.

-Mi niño pero mira que grande y hermoso estas 

Beso mi mejilla y acarició mis hombros, las lagrimas no tardaron en llegar a nuestros ojos, amaba a esa mujer como si fuera mi propia madre, ella jamas pudo tener hijos así que yo era lo más cercano que tenía a uno. 

-Tita te extrañe tanto ¿Cómo estas?

- Muy bien mi niño, no tienes que extrañarme más, convencí a tú tío de regresar a Corea, ahora tengo que estar aquí cuidando de ella y sé que tú no quieres tener que ver con esta situación pero es mi hermana cariño y sé que te ha lastimado tanto pero aún así quisiera que la vieras por última vez

-No sé si pueda verla- mi voz sonaba temblorosa 

- Entiendo pequeño pero me gustaría que lo hicieras antes de que..... bueno lo sabes ¿no?