Sugar Babie's (Yoonmin)

¡La galleta infiel!

Tenía tres días libres del trabajo y eso era porque el señor Choi había decidido ir a visitar a sus hijos, ayer también fui a ver a mi madre, ella era divertida en su estado demente, me contaba muchas aventuras no sabía si eran inventadas o de verdad ocurrieron pero me daba una cierta satisfacción escucharla hablar, era como ver a la madre que siempre desee, pero lo que también veía muy de cerca era  como poco a poco la enfermedad ese maldito cáncer la consumía. Yoongi paso por mi para ir a su casa a pasar un tiempo a solas, quería tanto estar entre sus brazos, lo necesitaba y sabía que él a mi también. Deje a Taehyung en buenas manos, últimamente Jungkook no me había dado algún motivo para desconfiar de él, al contrario se portaba mejor que antes, era menos posesivo y estricto con mi pequeño, lo agradecía mucho, Taehyung era un chico muy dulce y paciente y necesitaba alguien que fuera de la misma manera con él.

Llegamos a la hermosa casa Min, bajamos del auto y entramos; a menudo me preguntaba si Yoongi se sentía muy sólo al vivir ahí.

-Sube cariño y ponte cómodo, estaré en el despacho arreglando unos papeles rápidamente

Asentí y le di un beso en los labios, eran muy adictivos. Subí hasta su habitación, después de quedarme por algunas noches ya tenía mi pijama de repuesto en uno de sus cajones, me sentía muy incómodo con lo pantalones tan apretados así que los cambié por unos pantalones de pijama azules delgados, deje mi camiseta blanca. Mientras lo esperaba me puse a husmear entre sus cosas,  tenía varias fotos familiares y muchos adornos pequeños, tome una pelota roja parecía ser de un niño, sin detenerme comencé a jugar con ella pero la condenada se fue debajo de la cama, me agacha quedando de rodillas mirando hacia abajo tratando de alcanzarla, mis dedos son cortos así que era casi imposible me incliné más dejando mi trasero muy levantado.

-Ven aquí bolita, no te haré daño, vamos

Sentí unas enormes manos masajear con morbo mi redondo trasero, un gemido se escapo de mis labios.

-Mmmm me encanta este recibimiento bebé, ¿estas así por daddy?

Quise levantarme para besarlo pero me lo impidió, acarició mi cintura la cual estaba al descubierto, sus suaves y grandes manos llegaron hasta la cinturilla de mi pantalón y de un jalón lo bajo junto al boxer dejándome completamente al descubierto, acarició mis piernas dejando un escalofrío en toda mi columna hasta mi ingle, suspire deseoso a punto de perder la cabeza, la poca cordura que me quedaba se fue al carajo cuando sentí su lengua estimulando mi entrada.

-Mmmm Yoonnie Daddy más, dame más

-Estas delicioso bebé, gime para papi vamos

Claro que hice caso a su petición por no decir orden, su mano derecha fue a parar hasta mi erección la cual acarició lentamente, se separó y su lengua fue sustituida por su dedo medio.

-Siiiii, dame por favor

-Tranquilo pequeño quiero tenerte bien estimulado

Metió otro dedo y juro que casi me ahogo con la saliva que salía de mi boca, estaba extasiado, al tercer dedo yo ya rogaba como perra que me penetrara, quería ponerme en cuatro pero no podía su mano me mantenía con la cara contra el piso, se separó y sentí como se desnudó, una de las cosas más preciosas que he visto en mi vida es su pálido cuerpo pero ahora me lo estaba impidiéndo haciéndome jadear.

-Por favor, Daddy por favor

- Dime que querés bebé- dijo con voz grave mientras me acariciaba las nalgas

-A ti....te quiero dentro por favor

Lo que paso después de esas palabras dichas en desesperacion me hizo dar un grito de placer, entro de una en mi mientras me daba una fuerte palmada en la mejilla derecha, no tuvo que esperar mucho ya que moví de inmediato mis caderas para sentir su enorme extensión llenarme y tocar el punto tan dulce que me llevaba al cielo.