Capítulo 10.

10 0 0
                                        

Era un maldito, no lo podía creer, estaba furioso, pero, no podía parar de llorar, lloraba y lloraba mientras corría a mi hogar, con mi muñeca limpiaba estas estúpidas lágrimas que salían de mí, mis piernas estaban débiles y caí al suelo, golpeé este con mucha fuerza sacando todo el rencor dentro de mí.

- Mamá... Te necesito.

Dije para levantarme nuevamente, sentí unos brazos pasar por entre mi cintura y abrazarme, mis ojos se abrieron por la impresión y me volteé.

- C-Caín...

Me abracé a él con fuerza mientras lloraba en su pecho, sentía sus caricias en mi espalda, escuchaba sus relajantes latidos, mis lágrimas caían lentamente por mis mejillas, odiaba que él fuera mucho más alto que yo, pero ahora era lo que más necesitaba, sus manos tomaron mis mejillas y levantaron mi cabeza con delicadeza, con la llema de sus dedos limpió mis lágrimas y me miró a los ojos con ternura, tragué duro pero no quité la vista de sus ojos, apretó mi camisa y me acercó más a él y me besó.

- Oye.

Escuché la voz de Caín cuando me abrazó, había imaginado todo eso, ¿porque?, me separé de su cuerpo rápidamente.

- C-Caín... Ya lo sé, lo sé todo.

Dije llorando y él abrió sus ojos, tomó mis manos y las acarició con delicadeza, me miró a los ojos.

- ¿Q-Que?

Noté su nerviosismo en su mirar, en su hablar y hasta en su actuar, me solté con brutalidad pensando que sería otra imaginación, pero no.

- ¿Que pasa?

- N-Nada... ¿Que sabes?

- Matt... Matthew lo hizó.

- Espera... ¿Matt?... ¿Matt el chico que estaba enamorado desde tercer grado de tí?.

- Él... Aún nosé por que lo hizo... Pero, lo ví.

Mi mirada se desvío y él estaba ahí mirando desde el otro lado de la calle, se notaba un brillo en sus ojos, también en sus mejillas, se acercaba lentamente limpiando sus mejillas, Caín de un minuto a otro puso su brazo delante mío y me corrió hacía atrás y sacó su arma, apuntó a él chico y él se detuvo.

- Okey, okey, entiendo, no avanzare más, pero por favor Sthepen escúchame... No fuí yo... Créeme por favor.

- ¡Como que no fuíste, te ví Matthew!

Caín cargó su arma y luego escuché a lo lejos un grito.

- ¡Sthepen!, ¡Sthepen!.

- ¿Maxwell?

- S-Sthepen...

Se puso entremedio de nosotros y abrió sus manos llorando desconsoladamente, saqué el brazo de Caín y me acerqué a él.

- ¿Que pasa Max?.

- N-No... N-No es Él Diablo.

- ¿Que dices?

- No es él... Es... Es

Un gran ruído sonó, una bala desde lejos venía y atravesó la cabeza de Maxwell haciendo que este caiga al suelo de inmediato, llenando este de sangre, mis ojos se abrieron al igual que mi boca, esta la tapé rápido con mis manos heladas y mis ojos se cerraron para soltar lágrimas de ellos, me lancé al suelo cerca de él y comencé a llorar, Caín estaba detrás mío paralizado y Matthew boquiabierto mirando rápidamente a Caín y luego a mí.

- M-Maxwell... N-No... ¡Nooooo!. Eres un hijo de...

Me levanté rápido para ir a golpear a Matthew, esté reaccionó rápido bloqueando mi golpe el cual nunca dí por que Caín me detuvo agarrándome la muñeca con fuerza.

- Sthepen, él estuvo aquí con nosotros, no pudo haberlo hecho, Max teníalgo zón... Quizá el no es Él Diablo.

Tenía razón, no podía ser el diablo ya que estaba con nosotros, me solté de su agarré y pateé una lata con fuerza haciendo volar esta, sentía el cambio en mis ojos, ese cambio con el cual me estaba acostumbrando, apreté mis puños y grité.

- ¡Maldita sea!.

Caín se acercó a mi y me abrazó, cuando me alejé de él tomó mi mano y me llevó a donde el quería, Matthew íba detrás de nosotros por miedo a que le pase algo, Caín nos llevó a la cueva y yo me alejé de inmediato.

- N-No quiero volver ahí, N-No por favor...

- Necesito que lo hagas... Necesito que me ayudes a buscar cosas.

- Caín... N-No puedo.

- Sthepen...

Respiré ondo y acepté con la cabeza para acercarme a él y agarrarme con fuerza a su brazo.

- No me dejes solo por favor...

- No lo haré.

Comenzó a caminar hacía adentro conmigo en su brazo, miraba para los lados a medida que avanzábamos, quería encontrar algo rápido para salir de aquel lugar, ví la jaula donde estuvo Max cuando fue sucuestrado, me solté de Caín y fuí hacía allí, comencé a llorar al imaginarlo ahí amarrado muerto con una bala en la cabeza, sus muñecas levantadas por las cadenas, su cabeza cabizbaja goteando sangre, me acerqué más y la imaginación desapareció, miré para todos lados tratando de quitarme esos pensamientos de mi cabeza y un pequeño destello se hizo presente en mi vista, me acerqué a este y observé una medalla singular, dorada con una S. J graba en la parte trasera.

- ¿S. J?.

- ¿Dijiste algo?

-  N-No... N-No.

- ¿Seguro?, ¿No me estas ocultando nada?.

Caín se acercó a mi y tomó mis muñecas con mucha más fuerza que de costumbre, su mirada se hizo intensa y hasta terrorífica, me apegó a la pared provocando en mí mucho miedo.

- Caín, suéltame... Me lastimas.

- No creas todo lo que oyes Sthepen, pueden darte una puñalada en la espalda o bien... Pueden disparate en la cabeza.

Él DiabloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora