||Accept my love || YM Omegaverse

의사

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— Yo no me sonrojo... — murmuro el cacheton, obviamente rojo hasta las orejas.

— ¿A no? — rio levemente el mayor — A que se sonrojaaa, mira, mira, mira, esta todo rojito — YoonGi acariciaba las mejillas del menor con ternura, logrando ponerlo nervioso y posiblemente, más rojo. El espacio entre sus rostros era nulo, sus labios se rozaban cada vez que el mayor hablaba y eran capaces de escuchar el rápido latir de sus corazones. — ¿Te digo un secreto? — Murmuro de nuevo — Me encantan tus dulces labios, MinMin... — dicho esto, unió sus labios en el que comenzó con un dulce beso, donde el rostro del mas bajo era acariciado como si fuese un cristal precioso y delicado.

Cada segundo se intensificaba el beso, de un momento a otro, JiMin estaba sentado en las piernas de su Hyung, sus manos apresadas contra el pecho del chico, mientras sus labios compartían un cálido baile entre ellos, no fue hasta que sintieron la necesidad de respirar que se separaron para mirarse a los ojos.

— Que me has echo Park JiMin... no puedo controlarme cuando te tengo cerca, no puedo dejar de desear tus labios, no dejo de envidiar a todo aquel que te haga sonreír, pues no es por mí que sonríes. Simplemente tengo todo mi mundo de cabeza cuando estas cerca — murmuro YoonGi, escondiendo su rostro en el cuello del pequeño, respirando agitadamente, tratando de tranquilizarse con el aroma de SU omega. Podía sentir los rápidos latidos del corazón del pelirosa, eso lo hacía sentir bien, inmensamente feliz, dio una pequeñas lamidas donde algún día JiMin tendrá una marca, el lazo que lo unirá con un Alfa, apretó su cintura con algo de dolor, tenía miedo de que ese Alfa no fuese él.

— ¿D-de que habla, hyung? — tartamudeó JiMin, mientras llevaba sus manos temblorosas hacia las mejillas del mayor, para así levantar su rostro y poder ver aquellos lindos ojos gatunos que tanto le encantaban, trataba de buscar una respuesta concreta.

— No sé, como explicarlo, pequeño. Nunca me había sentido así — bufo, al no poder expresarse bien — Siento la necesidad de tenerte a mi lado, besarte, acariciarte, abrazarte, joder, hacerte el amor, por primera vez en mi vida, no quiero solo sexo, quiero explorar y marcar todo tu cuerpo que seas mío y solo mío, que los alfas que se te acerquen y huelan en ti, mi aroma mezclado al tuyo. Quiero hacerte el chico más feliz del universo, JiMin... creo que estoy enamorado de ti — he allí, el momento que JiMin esperaba desde hace meses, desde el primer momento en que olfateo a su soulmate, aquel día que de un momento a otro su corazón se agito de tal manera que podría haberse salido de su cuerpo. Las lágrimas no tardaron en rodar por sus mejillas, estaba feliz, en ese momento estaba seguro que era inmensamente feliz — ¡¿JiMin?! ¿Qué tienes? ¿Y-yo dije algo que te molesto? Por favor háblame, MinMin — hablo el alfa asustado de aquella reacción.

— Lo quiero mucho, Yoonie — exclamo JiMin antes de besar los labios de su adorado alfa, YoonGi felizmente le devolvió el beso, abrazando su cintura pegándolo más hacia su cuerpo. Escucharon un gran estruendo proveniente de la cocina, y de un mal salto JiMin estaba de culo en el suelo y YoonGi no aguanto la risa. — Min, eres un rompe momentos — bufo JiMin, mientras reia igualmente, YoonGi lo ayudo a levantarse para ir a averiguar que fue aquel estruendo.

Al entrar en la cocina vieron los utensilios todos tirados en el suelo y a la Sra. Yerin mirándolos con odio — ¿Qué sucedió mamá? — pregunto YoonGi recogiendo las cosas.

— Pues, las cosas estaban atravesadas y la torta caliente — respondió encogiéndose de hombros. — Bueno, ¡la torta esta lista! — exclamo como si nada hubiera pasado y comenzó a repartir el postre.