Capítulo 10

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El tiempo se pasó volando. Danna había seguido comiendo en el recreo con el grupo de Olivia y poco a poco comenzó a soltarse un poco con ellos. No es que hablara tanto, pero al menos no se quedaba callada cuando quería decir algo.

Descubrió que Alan y Olivia habían salido un tiempo, pero ocurrió algo y decidieron ser amigos. Cambiaron el tema rápidamente así que Danna no pudo saber la razón. Le pareció un poco extraño y quiso preguntar, pero la curiosidad mató al gato y Danna no quería morir.

Estaba preparando una mochila para llevarla a la casa de Olivia. Entró dos pijamas, cuatro panties, dos sostenes, dos conjuntos de ropa y un par de zapatos. Podría parecer demasiada ropa, pero para Danna era necesario (Solo por si acaso).

Desconectó el celular que estaba cargando y bajó corriendo las escaleras. Ya eran las seis de la tarde y su madre no estaba. Le había dicho que saldría con Martín y que llamara un taxi para irse. Danna marcó el número de la compañía de taxis y pidió uno con timidez. En diez minutos ya estaba frente a su casa. Le indicó la dirección que le había mandado Olivia por mensaje días atrás e intentó tranquilizarse mientras llegaba.

Al llegar pagó y respiró hondo antes de tocar el timbre. Inmediatamente, Olivia salió con una sonrisa y la empujó adentro. Danna caminaba desorientada mientras su amiga la empujaba escaleras arriba. Abrió una puerta al final de un largo pasillo y la cerró tras de sí.

—Que bueno que viniste. Ángela no va a poder venir y estaríamos solas Olivia y yo, que aburrimiento—Dijo Laura jugando con Olivia, esta última rodó los ojos con una sonrisa.

Danna se rió por lo bajo y dejó su mochila en una silla. Miró a ambas chicas con curiosidad. 

—Entonces..¿qué quieren hacer primero?—Dijo Olivia con energía.

Danna bajó la mirada con timidez y esperó a que Laura diera una idea. 

—Ordenemos pizza y veamos una película—Dijo Laura con ambas manos en la panza.

—Tú siempre tienes hambre—Se burló Olivia mientras agarraba el teléfono.

—Que sean de pepperoni—Dijo guiñándole un ojo.

Pov. Danna

Estuvimos charlando por un tiempo mientras esperábamos a que llegara la pizza. Laura y Olivia se discutían sobre qué película ver y yo me reía de sus insultos infantiles. Se notaba que eran muy cercanas. Al final, se decidieron por ver una llamada "Call me by your name". La portada se veía interesante así que me dio igual. Ya no estaba tan nerviosa como cuando llegué y me fui sintiendo más y más cómoda.

—Bueno, me prepararé palomitas en lo que llega la pizza, no puedo ver una película sin algo que comer.

Laura salió de la habitación corriendo dejándome sola con Olivia. Esta me sonrió sin decir nada. Me sentí algo incómoda al pensar que no le gustaba hablar conmigo, pero ignoré el pensamiento y le sonreí de vuelta. Se sentó a mi lado en la cama y recostó la cabeza en mis muslos.

Noté que había una foto de ella con un chico rubio, igual que ella, en la pared. Estaban en un parque y ambos reían y comían helado junto a los columpios. La miré disimuladamente y me tragué la vergüenza.

—¿Quién es el de la foto?—Mi voz salió algo ronca por no haber hablado en tanto tiempo.

—Es mi hermano, ¿no se nota?—Dijo riendo con un destello de tristeza.

—¿Está aquí?—Dije activando mis alertas.

—No...vive con mi padre. Solo nos vemos los fines de semana, pero hablamos todos los días. No sé qué haría sin él.

—Awww, que lindo. Yo quisiera tener una buena relación con mi hermana...pero está en ESA etapa, ¿sabes?

Olivia se rio y asintió.

—Lo divertido es que al ser mellizos, pasamos por esa etapa al mismo tiempo, era muy cómico. Peleábamos siempre, sin embargo, también nos perdonábamos siempre.

Algo se encogió en mi estómago causando un dolor punzante. Formé mi mejor sonrisa y respiré profundo.

—Amo que me masajeen el cabello, me relaja mucho—Dijo con los ojos cerrados.

Hasta ese instante, no me había fijado en que le había estado peinando el cabello todo el tiempo. Me sentí avergonzada y alejé las manos.

—Ey, ¿Por qué paras?—Dijo medio quejándose, medio riendo.

La puerta se abrió dando paso a un olor delicioso a palomitas que inundó la habitación. Olivia se levantó de un salto y le robó un puñado a Laura. Esta última le lanzó una mirada severa ocasionando una carcajada entre las tres. 

Luego de ponernos las pijamas, Olivia puso la película y apagó la luz. Nos sentamos en un mueble acolchado y nos arropamos con una manta. La película daba una vibra relajante y tenía una música asombrosa. Al pasar de la película, poco a poco iban apareciendo escenas más y más sexuales. Yo intentaba ocultar mi sonrojo.

Estaba tan concentrada en la película que me sobresalté al sentir algo en mi pierna. Era la mano de Olivia. No le di mucha importancia, ya que pensé que lo había hecho sin darse cuenta. Su mano se mantuvo ahí por un tiempo dándome una sensación de incomodidad momentánea. Entonces ocurrió otra escena de esas y noté su que comenzó a mover sus dedos en un leve roce, un escalofrío me recorrió por todo el cuerpo. 

La miré de reojo, pero esta tenía la vista clavada en la pantalla. A pesar de su enfoque en la televisión, pude notar que lo estaba haciendo intencionalmente. Poco a poco fue tomando confianza y ya estaba claro lo que estaba haciendo. Y todo esto estaba pasando sin que Laura tuviera la más mínima idea.

Cada vez ponía menos atención a la película y más a su toque en mis piernas. Nunca pensé que me sentiría de esa forma con una chica, pero solo podía desear que Laura no estuviera, en ese momento. Sus caricias eran delicadas y lentas haciendo que mi imaginación volara. 

El timbre sonó haciendo que retirara su mano con rapidez. Laura pausó la película y corrió en busca de las pizzas, como si su vida dependiera de ello. Volteé la mirada lentamente hacia Olivia y me encontré con sus ojos mirándome intensamente. Tragué con dificultad.

—¿Te está gustando la peli?—Dijo mientras sonreía y arqueaba las cejas.

—S-si...—Dije intentando esconder mi sonrisa.

Laura llegó con ambas cajas de pizza en las manos respirando entrecortadamente. 

—Estás como un tomate, chica. ¿Nunca has visto nada así?—Preguntó Laura burlándose de mis mejillas coloradas.

Olivia se rio para sí misma y yo me encogí de hombros. Laura me miró con desaprobación fingida y le dio una mordida a un pedazo de pizza. Apagó la luz y se sentó en su posición anterior. Y así se pasó la noche, hasta que la película nos terminó viendo a nosotras. Olivia no volvió a hacer nada luego de eso y yo me quedé confundida por lo que había ocurrido.

N/A

Damnnnn, amo los capítulos con sazón hahahaha. Díganme qué piensan sobre cómo va la historia! De verdad me interesa saber xd. Gracias por leerme!!! <3

La Vida De DannaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora