Dos meses después de la muerte de Seokjin, cada mañana me apoyaba en la barandilla del puente que colgaba sobre el río y bebía té caliente. Casi no podía dormir, por eso empecé a hacer caminatas al amanecer y aquél era el lugar donde daba la vuelta y regresaba.
Dormir por la noche era lo que más temía. Lo peor, el terrible shock que recibía al despertar. Abría los ojos sobresaltado y me asustaba la profunda oscuridad de comprender dónde estaba en realidad. Siempre tenía sueños relacionados con él. Dentro de un sueño ligero y penoso, mientras veía y no podía ver a Jin, sabía siempre que ya nunca más podría verlo en la realidad, que sólo era una ilusión.
Por eso, incluso cuando dormía hacía esfuerzos para no despertarme.
¿Cuántas veces habré recibido un amanecer helado, en el que abría los ojos confuso sintiendo una tristeza que casi me hacía vomitar, dando vueltas en la cama, cubierto siempre de un sudor frío? Me sentía arrojado en un tiempo pálido que respira en silencio cuando clarea al otro lado de las cortinas. En aquellos momentos, sentía tanto frío y tanta soledad que pensaba que hubiera sido mejor permanecer dentro del sueño. Era el amanecer de una persona sola que sufría con las reminiscencias de sus sueños sin poder dormir más. Siempre me despertaba al amanecer. Yo, cansado, sin haber dormido apenas, yo, que había empezado a conocer el terror hacia aquellas horas de soledad parecidas a una larga demencia que esperaban la primera luz de la mañana, decidí empezar a correr.
Compré dos conjuntos de chandal caros, compré unas zapatillas de deporte, e incluso compré un pequeño termo de aluminio para llenarlo de algo para beber. Me parece triste equiparse con tanta premeditación, pero pensé que me ayudaría. Empecé a correr nada más empezar las vacaciones de primavera. Iba hasta el puente y, al volver a casa, lavaba cuidadosamente las ropas y la toalla, lo metía todo en la secadora, y luego ayudaba a mi madre, que estaba ya preparando el desayuno. Después dormía un poco. Éste era mi estilo de vida. Por la noche, me encontraba con mis amigos, veía vídeos y evitaba estar sin hacer nada. Era un esfuerzo vano. La verdad es que no había una sola cosa que me apeteciera hacer.
Quería ver a Jin. Pero tenía la sensación de que debía continuar moviendo, a toda costa, mi corazón, mi cuerpo y mis manos. Y quería creer que, si pudiera seguir esforzándome, automáticamente lograría sobreponerme alguna vez. No había ninguna garantía, pero creía que era esencial llegar hasta ese momento.
Cuando murieron mi perro y mi pajarito, lo había conseguido más o menos de la misma manera. Pero en este caso no funcionaba. Y los días fueron pasando, marchitándose uno tras otro sin ninguna perspectiva. Yo seguía pensando como si rezara.
«Estoy seguro, seguro. Llegará un día en que podré liberarme de esto.»
![](https://img.wattpad.com/cover/152152920-288-k245793.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Moonlight Shadow » NamJin
RandomNamJoon ha perdido a SeokJin en un accidente de coche. La pérdida del primer amor de una forma tan brusca lo lleva a un estado de melancolía, tristeza y soledad que la impide seguir con su vida. Solo con el apoyo del hermano de SeokJin y de YoonGi...