Después de irse Tae, me dormí de nuevo. Dormí tranquila y profundamente, sin soñar por primera vez después de largo tiempo gracias a la medicina para el resfriado. Fue un sueño sagrado y lleno de ilusión, como una Nochebuena de mi infancia. Cuando despertara, iría al río, donde estaría esperándome Yoongi, para ver ese «algo».
Antes del alba. Mi cuerpo aún no estaba completamente bien, pero me vestí y eché a correr.
Era un amanecer tan frío como si fuera a helar, y parecía que la luna estuviese inmóvil en el cielo. Al correr, mis pasos resonaban en el azul silencioso, quedaban absorbidos en secreto y desaparecían por las calles.
Yoongi estaba ya en el puente. Cuando llegué, sonrió con los ojos brillantes y, con las manos en los bolsillos y la cara medio tapada por la bufanda dijo:
—Buenos días.
En el cielo color índigo, unas estrellas titilaban pálida y débilmente como si fueran a desvanecerse. Era una escena tan hermosa que casi me paralizaba. El río resonaba, fuerte, yel aire era límpido.
—Es tan azul que parece que el cuerpo va a disolverse en él, ¿verdad? —dijo Yoongi haciendo visera con una mano para que no la deslumbrara la luz.
Se veía vagamente la silueta de los árboles que se mecían al viento. El cielo se movía despacio. El claro de luna penetraba en la tenue oscuridad.
—Es la hora —la voz de Yoongi era tensa—. ¿Estás lista? A partir de este momento, la dimensión, el espacio y el tiempo de este lugar oscilarán y se desplazarán. A lo mejor no podremos vernos el una al otro, aunque estemos los dos juntos, y cada uno verá algo muy distinto... en la otra orilla del río. Pase lo que pase, no grites ni intentes cruzar el puente, ¿has entendido?
—OK —asentí con la cabeza.
Llegó el silencio. Yo, junto a Yoongi, miraba fijamente hacia la otra orilla, envuelta en el rugido del río. El corazón me palpitaba con fuerza y sentía cómo me temblaban los pies. Poco a poco, se acercaba el amanecer. El azul oscuro del cielo fue tomando una tonalidad celeste, y se oía piar a los pájaros.
Me daba la sensación de que un sonido tenue zumbaba en el interior de mi oído. Miré a mi lado y advertí sobresaltada que Yoongi ya no estaba conmigo. El río, yo, el cielo... y se oyó aquel sonido familiar e inolvidable.
El cascabel.
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Moonlight Shadow » NamJin
RandomNamJoon ha perdido a SeokJin en un accidente de coche. La pérdida del primer amor de una forma tan brusca lo lleva a un estado de melancolía, tristeza y soledad que la impide seguir con su vida. Solo con el apoyo del hermano de SeokJin y de YoonGi...