En alguna parte de Italia, una pelinegra (cofcofpelucacofcof) estaba vagando libremente por las calles de una pequeña ciudad.
Ese día se había librado del entrenamiento y de visitar a su familia por el día ya que todos los mayores se encontraban ocupados con ciertos asuntos de los cuales ella prefería seguir en su feliz ignorancia, así que había decidido fugarse de la seguridad de su sobreprotectora familia (era consiente que en realidad era una mentira, la Vongola SIEMPRE tenía un ojo sobre ella) y aprovechando el buen clima que ofrecía el día, recorrer algunos lugares tranquila sin tener que lidiar con personas malhumoradas porque se queda más tiempo en ciertas tiendas y en otras no.
Con un simple disfraz consistente en una peluca, sombrero y lentillas verdes, una camiseta a cuadros amplia pero ligera para el clima y unos capris, ella podía caminar libremente por las calles como una perfecta turista, salvó que esta turista hablaba un perfecto italiano y sabía que tiendas quería visitar puntualmente, hablando de eso; había una pastelería que quería visitar por tener una cata de sus productos a un precio racionable.
Feliz ante la idea camino despreocupadamente sin llamar la atención pero cubriendo sus ojos con el sombrero, entre eso al girar hacia la izquierda por unas pequeñas calles que eran un atajo rápidamente todos sus instintos le gritaron que subiera la guardia y se escondiera lo más rápido posible, solo pudo esconderse tras unos cubos de basura que fue lo único que logro ver a tiempo, a los pocos segundos noto que a un par de metros de ella dos hombres se reunirán en medio de las sombras que ofrecía los dos edificios a sus costados, los dos hombres murmuraron un par de cosas escuetas pero lo extraño de todo fue la sensación de alerta justo en el momento en que uno de ellos le entregaba un sobre al otro, rápidamente supo que el peligro no era con ellos si no que estaba...
Sin pensarlo mucho saco el pequeño revolver que tenía escondido entre sus ropas y disparo en dirección a un pequeño balcón justo detrás de ambos hombres, el disparo como la serie de maldiciones que se pudieron oír, hicieron que los otros dos corrieran rápidamente huyendo de la escena.
Ahora que había delatado su posición era mejor que ella huyera del lugar lo más rápido posible, sin embargo...
—¡maldición, estúpida mujer!
Mientras podía oír los insultos de la otra persona una bomba aterrizo demasiado cerca de ella, en esos pocos segundo lo único que pudo hacer fue correr literalmente a la posición de su atacante en un intento desesperado de escapar, logró escapar del mayor daño producto de las bombas, no así al parecer los autos que estaban estacionados demasiado cerca de esta. Molesta porque ahora no tan solo se vio involucrada con un lunático sino que además el escandalo producido por este podría alertar a la guardia civil y a la Vongola de su posición, haciendo que todos sus esfuerzos de escapar se fueran por el caño, con todo eso solo atino a cubrirle la boca al idiota que no paraba de gritar insultos y arrastrarlo a la fuerza lo más lejos posible antes de que los descubrieran.
Sin embargo eso fue más fácil decirlo que hacerlo, pues el otro encapuchado no dejaba de intentar atacarla con sus puños, harta de que la intentaran agredir mientras que claramente intentaba salvar sus traseros ella saco el revolver que tenía oculto y no dudo en apuntar a la garganta.
—Estoy intentando salvar nuestros traseros de la policía —susurro ella peligrosamente —si quieres que no te atrapen será mejor que te muevas en silencio hasta que encontremos otro lugar donde puedas gritarme con confianza, ¿está claro?
El otro solo bufo y murmuro un par de cosas antes de zafarse de su agarre a las malas y guiarla hasta un lugar donde sabía que podían esperar sin mayores problemas, a que el lugar estuviera seguro. Una vez llegado a un viejo departamento abandonado, el otro por fin se sacó la capucha de la sudadera que tenía puesta, revelando así una curiosa cabellera color plata que para ella le recordó más a un pulpo.
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Freedom (KHR)
Fanfiction"Un omega debe ser gentil y centrado en su familia, ha de escuchar a su alfa o su familia, porque estos tiene que velar por su seguridad cómo omega. Un omega debe aceptar su condición desde el momento de su primer celo y cumplir con las expectativas...