CAPITULO 5

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Luego del almuerzo regreso a la biblioteca, vuelvo abrir me coloco en recepción mientras despacho libro a jóvenes, adolescentes y soñaras para leer. Veo el mismo libro en el mostrador seguro alguien lo dejo ahí, no le prestó atención, así pasa el resto del día, cuando vengo a tener noción del tiempo miro el reloj son 8:45 ¡Dios!, pero si la biblioteca cierra a las 7 no me di cuenta por estar leyendo.

Cuando termine de cerrar la biblioteca. Camino hacia la casa mientras camino siento que alguien me persigue miro para atrás, pero no hay nadie. Apresuro los pasos siento nuevamente alguien miro me sorprendo ahí esta la rara criatura de ojos avellanas observándome fijamente. Camino hacia el animalito, pero da pasos atrás huye hacia la oscuridad pienso seguirla, pero no demasiado cosas raras me han sucedido hoy.

Llego a casa y busco a la señora Míriam y la veo —Buenas noches —digo ella sonríe amablemente y contesta

—Buenas noches mi niña, ve sube y dúchate para que cenemos.

Subo hacia mi habitación voy hacia el baño me ducho. Cuando salgo algo llama mi atención en el buró de la cama y no lo puedo creer lo que veo, es el mismo libro de la biblioteca, miro hacia las ventanas grito había algo parado en el balcón mi cuerpo comienza a temblar sin control. La señora Míriam entra y me habla, pero no la escucho, ella dice unas palabras en un idioma raro y todo se volvió oscuridad.

POV Míriam

Desde que llego la niña Amanda están sucediendo cosas muy extrañas, en cuanto piso la biblioteca sentí el poder de la biblioteca tenía siglos sin sentirla. Pero Amanda tiene algo muy poderoso, pienso mientras preparo la cena mientras ella se duchaba, pero escucho un grito me asusto y subo rápido la veo temblar le hablo pero no me responde

— ¿Amanda que pasa? —pero no reacciona y es ahí cuando digo

Somnum —Cayó al instante la sujeto haciendo uso de mis poderes y la coloca en la cama y la cubro

Miro y rebuscó en la habitación que pudo haberla asustado, pero veo el libro, pero de las criaturas creadas y lo toco y se ilumina con mi toque es porque me reconoce. Pero un olor a bosque llama mi atención camino hacia el balcón, y veo unas hiervas esas hierva solo hay en el bosque del Silem, miro veo signos de magia. Por otra parte ese olor yo lo conozco huele a...

—Por la diosa ese es el olor de ¡Elle! Pero ella está en letargo eterno a menos que la criatura allá aparecido.

Ahora que lo pienso Amanda dijo que vio una criatura extraña, para como lo describió se parece al mensajero de Ella, tengo que averiguar mañana iré para el bosque sagrado para ver si mis sospechas son ciertas.

Mi nombre es Elizabeth Monseur y tengo 2455 años, pero aparento una señora de unos treinta ocho, pero cuando voy hacia mi pueblo regreso a mi estado normal de una joven de veinte y dos, porque mientras Elle este en letargo no voy a envejecer, porque soy su gemela. Soy la segunda hija de mi padre el brujo y la bruja más poderosa más antiguo del Silem somos tres hermanas, esta Eliza la mayor, la más pequeña por minutos Elle mi gemela todas con distintos poderes, Elle es la más frágil, pero la más poderosa luego voy yo, soy como su escudo de Elle, y por último mi hermana mayor Eliza la que menos tiene poder por no haber nacido en la luna crecientes. Pero no significa que no sea poderosa, ella se dedicó a la hechicería obscura por esa razón la desterraron del bosque, condenando la al exilio del bosque del Silem. Prácticamente somos los fundadores del pueblo Silem por eso se llama como nuestro bosque sagrado, los humanos no saben de su existencia, y los que lo saben es porque son la pareja de alguno sé mi pueblo, hace años a mejor siglos vine a vivir al pueblo por orden del Alpha Ian Moon para proteger el pueblo de futuras guerras.

Pero si Elle despertó porque no vino aquí a mí su hermana, ahora que lo pienso también el temblor en la biblioteca pudo haberlo ella cuando despertó. Yo no estaba a su lado como su escudo, mi marca arde eso significa que tengo que ir a casa

mutatio in specie. —Digo en latín la lengua de nosotras las brujas ahora soy la joven que en realidad soy —domun —y aparezco en la casa de mis padres —padres digo en forma de saludo

—Hija— dicen ambos mi padre viene y me abraza mi padre es un hombre imponente, pero con sus hijas y esposa es un amor

—Hermana —escucho una voz que tenía un milenio, tres siglos y cinco décadas sin escucharla, pero que la reconozco donde quiera me volteo para ver mi mismo rostro— ¿Así es como recibes a tu hermana y señora? — dice ella, voy hacia ella Le doy una cachetada, se escucha un jadeo de padre de mis padres.

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EL ALPHA DOMADO POR LA DAMA (Errores)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora