Millie ya no es la niña buena de la que todo el mundo se enamoró y sus errores hacen que pierda sus amistades. Cuando ella está al borde de perder su carrera y tiene una sola oportunidad de arreglar todo, la única ayuda que recibe es de quien menos...
Perdón este capítulo no quedó como quería pero la canción es perfecta, tal vez lo puedan entender mejor si la escuchan, es la canción de FINN
Sus ojos poco a poco se abrieron por el tenue sol que entraba atraves de la cortina, se sentía fatigado y somnoliento se incorporo lentamente y con sus manos en sus ojos empezó tallarlos para lograr que estos enfocaran una vez por todas.
Cuando su vista se despejó pudo ver bien en donde se encontraba, dio un recorrido inspeccionando todo hasta que su vista se posó en Millie. Ella seguía dormida, estaba acostada de lado y con su cabello un poco revuelto, en esa posición Finn pudo ver claramente su cara, vio cada detalle ella, sus largas pestañas que casi rozaban sus pequeños pómulos rosados, su nariz finita que se arrugaba un poquito al parecer por un sueño y se detuvo en sus labios, naturalmente rojos y carnosos, se encontraban un poco entre abiertos y de inmediato pudo percibir la sensación fantasma que habían dejado sobre los suyos.
Se sonrojó un poco y siguió su recorrido hacia el cuello delgado y terso, algunos lunares lo acompañaban pero su preferido siempre fue el que tenía forma de corazón muy cerca de sus marcadas clavículas, se saltó al drede sus pechos, siempre le tuvo mucho respeto a Millie, aún que este casi se esfumó cuando vio sus delgadas, largas y tonificadas piernas.
Rápidamente se dio una cachetada, bajo de la cama muy rápido, tomó sus cosas y se metió al baño, se despojó de todo y se metió a la regadera, le importó muy poco que el agua estuviera fría, en esos momentos lo prefería así, sintió como el agua corría por todo su cuerpo y como se llevaba el abrupto enrojecimiento que sentía que lo delataría.
Una vez que termino de ducharse enredo la toalla al rededor de su cintura peino sus rizos hacia atrás y se miró en el espejo reprochándoce así mismo por haber visto así a Millie, se dispuso a vestirse pero se dio cuenta que algo le faltaba
—y mi bóxer? —
Sintió como su presión bajo y tal vez hasta se puso un poco pálido.
Busco por todo el baño pero era claro donde lo había dejado. revolvió su cabello, ajustó su toalla y volvió a salir con paso firme fue directo hacia su cama tomó su bóxer y cuando se dio la vuelta vio a Millie de reojo, esta se había girado y quedó boca arriba y con lo brazos sobre su cabeza, había adoptado una posición muy provocativa lo que hizo que Finn corriera hacia el baño y se vistiera en menos de un minuto.
Salió trotando del baño hacia la puerta, con una mano tapando su vista periférica, abrió rápidamente y no se molestó en ser cuidadoso al cerrar la puerta.
Millie se despertó con ese fuerte ruido se levantó poco a poco y fijó la vista en la cama de Finn este ya se había ido, seguramente a la cafetería del hotel a desayunar, se llenó de alivio de poder andar sin tener que cuidarse de que él la viera, se estiró y dio un último bostezo para dirigirse al cuarto de baño y tomar una ducha caliente.
Esa ducha le cayó muy bien, su cuerpo se destenso y se sintió un poco menos preocupada, se vistió y peinó rápido la verdad es que tenía hambre, desconecto su celular del toma corriente y lo encendió.
—pero que mierd...—
20 mensajes de Sadie, 16 de Noah, 19 llamadas perdidas de su madre y otros más junto con correos de su manager y los hermanos Duffer.
Primero llamo a su mamá, no quería preocuparla de más.
Luego no se detuvo en leer los mensajes de Sadie, sabía que eran puros regaños, así que se limitó a decirle que ya iba en camino, con Noah su corazón se llenó de ternura él estaba muy preocupado por ella, le agradeció ese gesto, lo necesitaba después de ver que ningún otro de sus amigos le había mandado un mensaje.
Con los correos le importaba muy poco lo que tuvieran que decir los hermanos o su manager así que solo lo bloqueo y salió del cuarto para buscar a Finn y así desayunar algo.
Cuando Finn llegó a la cafetería del hotel pudo observar que todo el mundo estaba con su pareja hasta el menú tenía temática romántica, con razón la señora había pensado que eran novios, este es un hotel para escapadas románticas!
Sintió algo parecido a la desilusión, él había pensado que se veían bien justos y por eso creían que eran pareja, despejó todas esas ideas absurdas de su mente rápidamente, se pidió un café y encendió su celular, tenía que hablar con los hermanos y con Shawn, supuso que ya habían llegado a New York .
Cuando lo encendió tenía muchas llamadas perdías pero las ignoro y fue directo a sus contactos y apretó Shawn Levy No espero mucho hasta que contesto
—Finn Wolfhard en donde carajos estas! Porque no subiste en el avión si ya estabas ahí!—
Shawn se escuchaba muy enojado, pero claro cuando iban a abordar Finn se escapó con la excusa de ir al baño y nunca más volvió.
— lo siento Shawn, pero tenía que hacer algo muy importante—
— y que era eso tan importante como para arriesgar tu carrera?—
— Millie—
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