Mi hermosa familia [Yoonseok/Sope/HopeGa]

11. Duele

Había despertado con los ojos pesándole. Yoongi se movió solo un poco, le dolía el cuerpo y parte de sus brazos ardían ligeramente. Intentó incorporarse pero le fue imposible cuando sus heridas rozaron las gasas haciendo que doliera, gimiendo suavemente mientras una insoportable punzada en su columna le obligo quedarse quieto en la cama.

Pronto fue retenido por unos brazos suaves. Miro a quién le detenía y observo el espeso cabello de Hoseok y su ligera sonrisa con algo de asombro. Entonces recordó a Jiyeon en medio de la carretera, a el abrazándola con fuerza mientras el auto se aproximaba a ellos.

—Jiyeon. –Murmuró, asustándose inmediatamente, tratando de incorporarse pese al molesto dolor– ¡Hoseok... Jiyeon, mi hija...! –Sollozó, aferrándose a Hoseok. El mayor lo abrazo rápidamente y acaricio su cabello negando.

—Amor, calma –murmuró, apartándose para limpiar sus lágrimas – Nuestra bebé esta bien, esta con Hee y Hani afuera –Comentó, acariciando el cabello de su esposo dulcemente.

Yoongi suspiro aliviado. Su pequeña estaba bien, esperándolo afuera junto a su hermanita y su hermana. Miro a Hoseok de nuevo y no puede evitar sentirse contento, tomando la mano de Hoseok entre la suya suavemente.

—Lo siento –lamentó, aun con unas cuantas lágrimas bajando por su rostro– Siento haberme ido, no debí hacerlo, no...

Se vio interrumpido tras el beso que Hoseok le dio, sosteniendo su rostro entre sus manos mientras acariciaba sus mejillas esparciendo las lágrimas que el mayor empezó a derramar, juntando sus frentes mientras le rodeaba con sus brazos y lo abrazaba sin casi nada de fuerza.

—No me vuelvas a asustar así –Pidió, negando mientras escondía su cabeza en el hueco del cuello y hombro del mayor – No lo vuelvas a hacer... Por favor, sentí morirme –Lloro, juntándose más a él.

Yoongi negó, elevo sus manos y acaricio su cabello. Hoseok temblaba ligeramente, sorprendiéndole solo un poco. Sentía que tenía a un niño en sus brazos. Le aparto suavemente, limpio sus lágrimas y besando dulcemente sus labios.

—Amor... Vamos a salir de esta –sonrió– Los cinco...

Y entonces reacciono de nuevo. Se llevo una mano al vientre y le dolió, porque antes se sentía completo y ahora estaba extrañamente vacío. Miro a Hoseok aterrado, palpando aún esa zona que se encontraba plana, y que sabía no estaba así. Hoseok entonces le tomo las manos y las retiro de su estómago, elevándolas a la altura de su pecho mientras lo miraba fijamente y besaba las mismas.

—Ren... –Yoongi murmuro. Hoseok negó lentamente, con un destello de melancolía en sus ojos avellana que se cristalizaban de nuevo.

El mayor negó reiteradas veces, no creyendo la noticia. No, su bebé no se podía haber muerto, por su puesto que no. Estaba dentro de el, lo protegió en su interior, ¿no? 

—No... Hoseok... Por favor, dime que no... –Un sollozo escapo de sus labios. Hoseok lo abrazo inmediatamente pues empezó a temblar de una manera anormal, palideciendo de inmediato.

—Amor... Calma... Yo, yo lo siento... –Susurró. 

—Ren... Mi pequeño... Ren... mi-mi bebé.

Yoongi lloro desconsoladamente hasta que se quedo callado. Hoseok entonces sintió el peso muerto de Yoongi sobre el, lo separo asustado y el cuerpo del mayor se fue hacia atrás cayendo en la camilla, con los ojos cerrados mientras la máquina pitaba incesantemente marcando un ritmo cardíaco anormal que pronto se regularizo de nuevo. Solo se había desmayado, pero estaba bien.

—Maldición –Hoseok empezó a llorar, tomando la mano de su esposo y besándola con dolor.

Hani ingreso entonces con Hee y Jiyeon quienes al verlo corrieron a abrazar a su padre. Hani aguardo en silencio, segura de que Yoongi ya sabía la noticia. La melancolía era palpable en el ambiente, asfixiante a decir verdad.