AMOR A PRIMERA VISTA [TERMINADA] // LIT KILLAH // MAURO MONZON

13.

Capítulo 13.

//Narra Cami//

—Mauro... —lo abracé por el cuello —solo quería sentir el piso, se ve cómodo.

Me veía con el ceño fruncido pero no pudo evitar reír.
Me extendió su mano para ayudar a pararme, nos sentamos en su cama y nos pusimos a platicar de cosas aleatorias y gracias a eso, supe más de su vida y él de la mía.

...

—¡¿Es tu papá?! —bastante sorprendido y con la boca abierta, me miró.

—Pueeees verás, pasaron muchas cosas, es mi padrastro y como está re enamorado de mi madre, hace todo lo posible para tenerla feliz, así que, no me molesta, de hecho, cuando me expulsaron de mi antigua escuela él se ofreció a dejarme entrar en la suya, re piola el tipo.

—No me imaginaba que fuera tan amable —aún sin creerlo, llevó sus manos a su cabeza, como si hubiera vivido en una mentira toda su vida. —por cierto, ¿Por qué te expulsaron?

¿Vos preguntás eso en serio? Ya sé que no me veo como la típica piba problemática pero boludo, ¿en serio?

—Ya sé que me veo re santa, mi madre dice que soy una angelita.—dije burlona.

Mauro soltó una risa ante mi comentario y después de unos segundos habló. —No... Pero en posta boluda ¿Qué hiciste?

¿No soy santa? Che me dolió

—Misteriosamente una profesora cayó de las escaleras, no sé qué pasó pero toda la culpa me la comí yo.

Pude notar como se veía algo asustado.

—¡Boludo es joda! —le di un pequeño golpe en el hombro mientras reía al mas no poder, ya que, su reacción había sido una verdadera joya.

— Y-ya sabía —dijo completamente rojo.

—En realidad... —cambió mi tono a triste, pero en ese momento tocaron la puerta.

—Mauro, Oscar te ocupa, está en el garaje —se hizo escuchar la voz de Ale, al verlo, estaba parado en el marco de la puerta con los brazos cruzados y una sonrisa.

—Ah es verdad, Cami bancame un rato, no tardo —se paró rápido y salió de la habitación.

Me quedé sentada con un poco de miedo por la presencia de Ale, aún tenía algo de miedo por lo que pasó, pero me limité a solo mirar mi celular.

—No deberías contarlo como si fuera algo normal —dijo mirando la ventana y con un tono de voz algo preocupado y serio. —Porque no lo fue boba.

¿Acaso él... Sabe? ¡Recién lo conozco!

—V-vos... ¿De qué hablas? —dije temerosa, era imposible que el supiera algo sobre mi.

—La razón por la cual te mudaste de ciudad —volteó a verme bastante serio, yo estaba en shock —Tene cuidado contando eso pelotuda. —dijo eso ultimo molesto, se dio la vuelta y simplemente se fue.

Estaba totalmente paralizada en la cama, no podía ser verdad... ¿Cómo sabía eso? Era la primera vez que lo veía en mi vida para que lo supiera... Tal vez solo quiso asustarme, pero de algo estoy segura, estuvo detrás de la puerta todo este tiempo escuchando, alto chismoso, aunque es verdad, no creo que pueda contarle eso a Mauro, fui descuidada.

Pasaron poco más de 10 minutos para que Mauro regresara, me sentía mal, le mentí sobre Ale y ahora tendré que mentir sobre mi expulsión, siendo sincera no quería hacerlo, me sentaba mal.

—¿Estás lista? —feliz se acercó a mí y me tendió la mano.

—¿Para qué? —dije confundida, por lo que no pude reaccionar para tomar su mano.

—Salir un rato, veni —tomó mi mano y me llevó jalando bastante tierno hasta la puerta principal.

Pude notar como un sujeto con traje se refería a Mauro de una manera muy servicial, éste le entregó unas gafas negras y una gorra.

—Gracias, casi lo olvido —le dijo amablemente mientras recibía las cosas.

Hola señor desconocido.

—Con cuidado señor —se despidió el hombre para después cerrar la puerta de la casa.

Adiós señor desconocido.

—Si vamos a robar, me hace falta un traje a mí también —dije burlona mientras lo veía ponerse todo.

—Esto es... Porque me hace daño el sol ¿Viste? Estoy re blanco.

Obvio, el sol es peligroso incluso cuando está nublado...

Yo sabía la razón por la cual usaba eso y no era el sol, pero hice la que me lo creí, al parecer no quería que supiera... Pero era comprensible, debe ser una decisión difícil, lo entendía, yo tampoco podía decirle algunas cosas... Pero algún día... Ambos de alguna manera íbamos a enterarnos de esos secretos, de eso estaba muy segura.

Caminamos unas cuantas cuadras, no podíamos parar de hablar, era un tema tras otro, che, este pibe de verdad me cae re bien.

Muchos pensaran que es normal ir a comprar helados si salimos a caminar pero no, tía Cami no quería helado, sino unas donas de chocolate que vio en una repisa, buena Camila.

Entramos a la cafetería, nos fue re bien, había comenzado a llover y pudimos tomar café junto con las donas.

—Cami ¿Cómo es posible que no engordas blda? —dijo bastante divertido mientras me veía comer.

—Hay algo extraño en mí, al parecer tengo un hoyo negro por estomago, pero agradezco mi rareza.

Mauro soltó una risa bastante tierna ante mi comentario —¿Sabes? ¿Vos me tenés confianza? —dijo dudoso mientras se llevaba una dona a la boca.

—Claro, sino ni siquiera hubiera venido con vos —dije feliz y algo obvia.

—Es verdad —me miró bastante sonriente —Pero sabes... Hay algo que te quería decir pero tenía miedo de hacerlo —miró su taza de café un poco nervioso.

—Mauro, sea lo qu...

Antes de que acabara, llegaron varias tipas alrededor de Mauro gritando su nombre y armando mucho alboroto, pude notar el pánico en su rostro al tratar de buscarme con la mirada.

—Eh... Perdón ¿podrían esperarme afuera? —habló Mauro en voz alta.

Las chicas fueron sacadas por el personal de la cafetería, todas se quedaron afuera esperando, eran como unas 30 sin exagerar. Pude ver su preocupación por intentar explicarme lo que acababa de pasar.

Me miró y se podía notar que no encontraba la manera de iniciar la conversación nuevamente —Y-yo... Perdón, te lo quería decir pero...

Me paré dispuesta a ir a su lugar, le tomé las manos y le sonreí. —Ya lo sabía —dije con una sonrisa mientras lo veía a los ojos.

Pude ver que se quedó boquiabierto ante mis palabras, estaba sonriendo, se veía aliviado de alguna manera.

— ¿Desde cuándo? —me miró bastante sorprendido.

—Desde que nos castigaron a los dos y me contaste sobre el freestyle.

Estaba muy feliz, se ve que no esperaba mi reacción.

Antes de que pudiera decir algo Mauro se paró y en un movimiento rápido nuestros labios se juntaron...

...

❤CHAN CHAN!! me encantan sus comentarios!! Sigan así! Me ayudan a seguir con esto! Son hermosas!!